🔒
Hay nuevos artículos disponibles. Pincha para refrescar la página.
AnteayerSalida Principal

30 razones por las que ❤️ Plasma de #KDE

9 Diciembre 2025 at 19:11
Por: victorhck

Utilizo Plasma de KDE y todo su ecosistema desde hace más de 15 años y en este tiempo he encontrado un software y una comunidad que siguen haciendo mi uso de la informática cómodo, atractivo visualmente y sobre todo libre.

Se lee el texto: Únete al juego ¡Colabora con KDE! y la mascota de KDE que es un simpático dragón verde corriendo sobre un fondo azul con unas esferas azules.

La comunidad de KDE me ha ofrecido a mi y a miles de usuarios en todo el mundo, las herramientas necesarias para mantenernos libres y aún así poder presumir de un entorno de escritorio funcional y bonito.

Un ecosistema lleno de aplicaciones útiles y funcionales y un entorno de escritorio llamado Plasma repleto de funcionalidades y estilo que es la tendencia de otros sistemas operativos privativos (sí Microsoft, te estoy mirando a tí).

El próximo año 2026 KDE cumplirá 30 años, y Kai Uwe ha compartido en su blog 30 razones por las que a él Plasma de KDE le ha robado el corazón. Tienes el artículo original en inglés publicado bajo licencia CC-by-sa en este enlace:

Me han parecido unas grandes razones con las que coindía por completo, así que he querido traducirlas y compartirlas en mi blog. Seguro que tu también coincides en gran parte con muchas de estas razones y quizás descubras algunas que no sabías.

Entre paréntesis y cursiva he añadido, cuando lo he creído conveniente, algún comentario propio sobre la razón en cuestión.

  1. Cuando suspendo mi portátil, cualquier video o música deja de reproducirse
  2. Puedo usar tres dedos en mi panel táctil para cambiar de escritorio virtual
  3. Recibo una notificación cuando mi mouse inalámbrico está a punto de quedarse sin energía
  4. Puedo hacer clic con el botón central en una ventana en la barra de tareas para cerrarla
  5. Puedo tener una nota adhesiva en mi panel para usarla como bloc de notas
  6. Puedo hacer clic con el botón central en el icono de notificación para activar el modo «no molestar»
  7. Hay un pequeño y práctico plasmoide de selección de color para mi panel.
  8. Puedo colocar el cursor en la esquina de la pantalla para echar un vistazo a mi escritorio
  9. Puedo mantener cualquier ventana siempre arriba cuando lo necesito
  10. Puedo crear un código QR de cualquier cosa que copie en mi portapapeles
  11. Cuando tomo una captura de pantalla, puedo arrastrarla a donde la necesito
  12. Puedo cambiar el brillo de la pantalla moviendo el mouse sobre el ícono de brillo
  13. Puedo arrastrar una ventana a la parte superior de la pantalla para maximizarla
  14. Puedo enviar una ventana a diferentes escritorios virtuales usando un acceso directo global
  15. Hay un pequeño medidor de volumen en vivo en cada control deslizante en la ventana emergente de volumen.
  16. Puedo abrir una pequeña ventana de lupa alrededor del cursor del mouse.
  17. Puedo dibujar líneas rojas en la pantalla usando un efecto de escritorio. (aunque todavía no sé muy bien en qué me puede eso servir).
  18. Puedo usar los botones de avance/retroceso del mouse en la barra de tareas para cambiar pistas de música
  19. Cuando muevo el mouse, el cursor se hace cada vez más grande, ¡y no hay límite!
  20. La luz nocturna reconforta mis ojos en las horas por la noche.
  21. KRunner encuentra pestañas del navegador entre cientos de pestañas que tengo (y muchas otras cosas, y funcionalidades)
  22. Puedo subir el volumen del altavoz por encima del 100% cuando sea necesario
  23. Puedo mover la barra de título de una ventana para cambiar su opacidad y comparar cosas rápidamente
  24. Puedo hacer que la tecla Copilot de mi teclado haga algo útil (no tengo tal cosa, pero sí he redefinido algunas teclas para darles otra funcionalidad que necesito)
  25. Puedo usar reglas de ventana para forzar que las aplicaciones se abran exactamente como quiero. (amen, qué útil es eso para mí)
  26. Puedo agregar atajos globales personalizados para casi cualquier cosa
  27. System Monitor muestra una gran cantidad de información (que también puedo copiar en modo texto para añadirlo en un reporte de bug, en un foro, etc)
  28. Puedo acelerar la reproducción de prácticamente cualquier vídeo desde el controlador multimedia de Plasma.
  29. Puedo usar Meta clic izquierdo para mover y Meta clic derecho para cambiar el tamaño de una ventana en cualquier momento (sin necesidad de tener una puntería extraordinaria para encontrar el tirador de la ventana para hacerlo)
  30. Puedo acceder rápidamente a archivos recientes abiertos en una aplicación haciendo clic derecho en la entrada de la barra de tareas

Y la lista podría extenderse en un número muuuucho mayor ¿Te animas a hacerlo? Usa en los comentarios tus otras razones por las que amas a Plasma de KDE y comparte con la comunidad.

Y para seguir haciendo Plasma y todas las aplicaciones cada vez mejor, no dudes en hacer un pequeño donativo para que la comunidad de KDE pueda seguir desarrollando su gran trabajo en libertad e independencia:

Botón con el icono de KDE y el texto: Powered by KDE

victorhck

Se lee el texto: Únete al juego ¡Colabora con KDE! y la mascota de KDE que es un simpático dragón verde corriendo sobre un fondo azul con unas esferas azules.

Botón con el icono de KDE y el texto: Powered by KDE

Recopilación del boletín de noticias de la Free Software Foundation – diciembre de 2025

3 Diciembre 2025 at 17:09
Por: victorhck

Recopilación y traducción del boletín mensual de noticias relacionadas con el software libre publicado por la Free Software Foundation.

¡El boletín de noticias de la FSF está aquí!

La Free Software Foundation (FSF) es una organización creada en Octubre de 1985 por Richard Stallman y otros entusiastas del software libre con el propósito de difundir esta filosofía, frente a las restricciones y abusos a los usuarios por parte del software privativo.

Por cierto este mes se cumplen 40 años de la creación de la FSF.

La Fundación para el software libre (FSF) se dedica a eliminar las restricciones sobre la copia, redistribución, entendimiento, y modificación de programas de computadoras. Con este objeto, promociona el desarrollo y uso del software libre en todas las áreas de la computación, pero muy particularmente, ayudando a desarrollar el sistema operativo GNU.

Mensualmente publican un boletín (supporter) con noticias relacionadas con el software libre, sus campañas, o eventos. Una forma de difundir los proyectos, para que la gente conozca los hechos, se haga su propia opinión, y tomen partido si creen que la reivindicación es justa!!

Puedes ver todos los números publicados en este enlace: http://www.fsf.org/free-software-supporter/free-software-supporter

¿Te gustaría aportar tu ayuda en la traducción y colaborar con la FSF? Lee el siguiente enlace:

Por aquí te traigo un extracto de algunas de las noticias que ha destacado la FSF este mes de diciembre de 2025.

Sólo el software libre permite la soberanía digital

Del 24 de noviembre por la FSFE

El “Germany Stack” es un proyecto central de política digital del gobierno federal alemán. La FSFE pide que Stack se planifique en estrecha coordinación con los socios europeos y se implemente íntegramente como software libre, ya que sólo las cuatro libertades permiten la soberanía digital. Continúe leyendo para obtener más información sobre los detalles de esta solicitud del gobierno federal alemán, incluidos los principios en los que debería basarse el Stack.

El ejército estadounidense quiere arreglar su propio equipo. Los contratistas de defensa están intentando derribarlo.

Del 26 de noviembre por Boone Ashworth

Es probable que las disposiciones sobre el derecho a reparar en la Ley de Autorización de Defensa Nacional, que asegurarían la financiación para el ejército estadounidense en 2026, sean eliminadas del texto final del proyecto de ley a pesar de disfrutar de un amplio apoyo bipartidista, dijeron a WIRED fuentes familiarizadas con las negociaciones en curso.

Dicen que es probable que las disposiciones de la ley que permiten a los militares reparar sus propios equipos se eliminen por completo y se reemplacen con un plan de suscripción de datos como servicio que beneficie a los contratistas de defensa.

Cloudflare caído: la interrupción global afectó a gran parte de Internet

Del 18 de noviembre por Kate O’Flaherty

Aparentemente, la mitad de la red mundial estuvo caída a mediados de noviembre debido a una interrupción de Cloudflare, lo que demuestra que el software privativo no es tan estable y seguro como les gusta afirmar a sus proveedores.

Tantos sitios web que dependen de un único proveedor para servicios de red y seguridad conllevan grandes peligros, tanto para su libertad como para su capacidad de utilizar un programa en el que puede confiar para trabajar. El software libre ciertamente también puede sufrir interrupciones, pero hay muchas más soluciones cuando se utiliza software libre que con software privativo.

Si actualmente utiliza un programa que se vio afectado por la interrupción de Cloudflare (o su lugar de trabajo lo hace), ahora podría ser un buen momento para hablar sobre cambiar a un programa comparable que respete la libertad.

apoyo_fsf

Estas son solo algunas de las noticias recogidas este mes, ¡¡pero hay muchas más muy interesantes!! si quieres leerlas todas (cuando estén traducidas) visita este enlace:

Y todos los números del «supporter» o boletín de noticias de 2025 en español, francés, portugués e inglés aquí:

Support freedom

victorhck

apoyo_fsf

La muerte de un iPod

1 Diciembre 2025 at 11:42
Por: victorhck

Un relato sobre cómo el brillo de un producto de Apple puede ser nada más que un espejismo, una cárcel muy lujosa y cara para sus «fanboys»

Ilustración con el texto "Software libre. Sociedad libre" y 4 iconos que representan las cuatro libertades que promulga y ofrece el software libre: Ejecución, inspeccionar el código, compartirlo y modificarla compartiendo las modificaciones

Una pequeña ficción sobre una historia de uno de esos dispositivos de Apple, que su márketing hace que lo necesites y después de unos años te dice que eso ya no es «cool» que mejor que cambies ese dispositivo que puede ser funcional, pero que ya está desfasado.

Un modelo de negocio que está basado en la opacidad, en la privación de libertad a sus usuarios, que irónicamente muchos de ellos son fieles defensores de sus dispositivos Apple, como Adam, el protagonista de este relato.

Este artículo es una traducción de un artículo escrito en inglés por Jason Self publicado bajo una licencia libre y publicado en su blog, que puedes leer en este enlace:

La muerte de un iPod

Adam no solo poseía productos Apple, profesaba fe en ellos. Con treinta y ocho años, programador de profesión, había pasado casi dos décadas cultivando una identidad como hombre de buen gusto, y el sumo sacerdote de ese gusto era la empresa de Cupertino. Sus amigos, su familia, sus compañeros —todos le conocían como «el tipo de la manzana», el que podía explicar, con la paciente convicción de un misionero, por qué sus elecciones eran… menos considerado. Su identidad no era solo usar los productos, sino entender y evangelizar su inherente «genio».

El objeto más sagrado de Adam, el brillante testimonio de su larga devoción, era un iPod Classic de 160GB. Era el último de su tipo, un bloque denso y pulido de cromo y aluminio anodizado que contenía quince años de su vida en sus pistas magnéticas giratorias. Era, decía a menudo, la obra completa de Adam, meticulosamente seleccionada.

Estaba en una fiesta en el abarrotado piso de un amigo, el aire cargado con el olor a cerveza artesanal y curry para llevar. Alguien había puesto una lista de reproducción genérica en streaming: un río sin fricciones de indie pop aprobado por algoritmos. Adam, sosteniendo su iPod como si fuera un libro de oraciones, estaba entre las personas de la fiesta.

«Verás, este es el problema», dijo, señalando a una pequeña audiencia cautivada. «Estás subcontratando tu gusto. Estás dejando que una máquina te diga lo que te gusta.»

Un colega más joven llamado Ben, que vivía su vida a través de una serie de listas de reproducción así, le miró escéptico. «Es fácil, tío. No tengo que pensarlo.»

«¡Exacto!» Los ojos de Adam se iluminaron. Este era su territorio. «Deberías pensarlo. La música no es solo ruido de fondo. Es la arquitectura de tus recuerdos. Mira.» Levantó el iPod. «Cada canción que hay aquí, la he elegido yo. Yo valoré. Lo arreglé. He construido esta biblioteca, pieza a pieza, a lo largo de una década. No es solo una colección, es un mapa de mi vida.»

Desbloqueó la pantalla, la icónica rueda de clics zumbando suavemente bajo su pulgar. El sonido era una fuente de placer profundo y táctil, un fantasma analógico en la máquina digital. «La genialidad de la rueda de clic», continuó, deslizando el pulgar sobre su superficie lisa, «es que puedes navegar por diez mil canciones sin mirar nunca la pantalla. Es memoria muscular. Es conexión».

Navegó hasta una lista de reproducción. «Y el software… Es magia. Pura magia. Hay estas mezclas geniales: simplemente crean sets perfectos de una hora basados en una sola pista. Es como tener un DJ que vive dentro de tu cabeza».

Habló de la «integración fluida», refiriéndose a cómo el iPod, la biblioteca de iTunes en su Mac y su antiguo iPhone funcionaban juntos en una «experiencia de usuario armoniosa y holística.» Describió el ecosistema no como una línea de productos, sino como una filosofía. Era un «jardín amurallado», y él era un residente feliz, alabando los altos muros que mantienen fuera el caos del mundo exterior: los virus, el mal diseño, la vulgaridad de la elección sin una cuidada selección.

«¿Pero qué pasa si muere?» preguntó Ben, con una pregunta sincera. «Ya no las fabrican, ¿verdad?»

Adam sonrió, paciente y cómplice. «Es Apple. Simplemente funciona. Y además,» añadió, con el núcleo de su delirio brillando, «soy parte de la familia. Cuidamos de los nuestros.» De verdad lo creía. No era solo un cliente. Era socio, contribuyente a la cultura, un compañero que compartía su genialidad. En su propia mente, era un vendedor muy querido y valioso para la mejor empresa del mundo.

Parte 2: La ambición bloqueada

La idea llegó, como suelen ocurrir las mejores, en un momento de tránsito tranquilo. Adam iba en el tren de las 7:42 de la mañana hacia la ciudad, el ritmo de las ruedas era una percusión familiar para la banda sonora de su vida. Su iPod estaba en modo aleatorio, un vasto océano de 20.000 canciones. Salió a la luz una canción de una banda indie olvidada hace mucho tiempo, una canción que había puesto cinco estrellas hace una década y que no había vuelto a escuchar desde entonces. La repentina oleada de recuerdos fue embriagadora.

Y entonces surgió la chispa.

El modo aleatorio es demasiado aleatorio, pensó. El genio es demasiado prescriptivo. Su biblioteca era un museo, y él solo visitaba las exposiciones principales. Lo que necesitaba era un conservador de todo ese arte que pudiera indagar en los archivos de esa biblioteca. La idea floreció, completamente formada, en su mente: «Modo aleatorio priorizado.» Un nuevo modo que reproduciría de manera inteligente solo sus canciones valoradas con cinco estrellas, pero con un giro crucial: priorizaría temas que no había escuchado en al menos seis meses, quizá un año. Sería un sistema para volver a descubrir sus propios tesoros olvidados, para revitalizar la misma biblioteca que había construido toda su vida.

Fue una idea realmente brillante. Simple, elegante y, para un programador como él, perfectamente alcanzable. Una oleada de energía pura y creativa recorrió su cuerpo. Esto era todo. Esta era su oportunidad para devolver, para añadir un pequeño toque de su propia ingenio a la «magia» que tanto veneraba. No era solo un usuario, era desarrollador. Podía contribuir a la familia de Apple.

Esa noche, estaba sentado en su escritorio, nervioso de excitación. Conectó el pesado iPod plateado a su MacBook. El dispositivo apareció en su escritorio, un icono familiar de confianza y fiabilidad. Abrió el sistema de archivos, esperando encontrar… algo. Un archivo de configuración, una carpeta de scripts, un lugar donde vivía la lógica del dispositivo. Algo.

Solo encontró las carpetas multimedia: Música, Vídeos y Podcasts. El sistema operativo, el firmware que controlaba todo el sistema, era invisible.

Un destello de confusión, nada más. Se adentro en la red, sus dedos volando sobre el teclado. «Cómo acceder al firmware del iPod Classic.» «Kit de desarrollo para iPod Classic.» «Código fuente del iPod Classic.»

Los resultados de búsqueda eran un páramo árido. No existían portales oficiales para desarrolladores de Apple para el sistema operativo del iPod. No hay kits de desarrollo de software (SDKs). Sin documentación. Encontró decenas de hilos en foros iniciados por personas como él, curiosos que hacían las mismas preguntas, recibidos con el mismo silencio resonante.

Se adentró más en artículos más técnicos. Aprendió sobre los propios archivos de firmware, los paquetes .ipsw que iTunes usaba para las actualizaciones. Pero no eran código fuente. Eran archivos binarios compilados, bloqueados, cifrados y firmados digitalmente por Apple. Eran cajas negras, diseñadas para ser instaladas, no para ser comprendidas.

La emoción en su pecho se fue transformando lentamente en un nudo frío de incredulidad. La «magia» era de sentido único. La interfaz hermosa e intuitiva era únicamente la superficie pulida de una bóveda sellada. Había pasado años admirando la arquitectura de los muros del jardín, sin pensar ni una sola vez en preguntar si la puerta estaba cerrada desde fuera.

El conflicto que iba a definir la siguiente etapa de su vida acababa de comenzar. No era un error del sistema. El sistema funcionaba perfectamente. El problema, empezaba a entender, era su propia ambición. El «problema» era su deseo de cambiar el dispositivo que creía suyo. Por primera vez, se dio cuenta de que no podía.

Parte 3: La despedida

Adam era un hombre del sistema. Cuando se enfrentaba a un problema, su instinto era seguir los canales adecuados. Un muro técnico había bloqueado su ambición, así que ahora apelaría a los arquitectos. Aún mantenía la creencia de que todo era un malentendido. La «familia Apple» se construyó sobre buenas ideas. Tenía una buena idea y necesitaba presentarla a las personas adecuadas.

Navegó hasta los foros oficiales de Soporte de Apple, un espacio limpio y en blanco de discusión ordenada. Pasó una hora componiendo su publicación, refinando cada frase para lograr el tono perfecto de un miembro leal y constructivo de la comunidad. No estaba allí para quejarse, estaba allí para hacer una contribución.

La publicación que realizó en el foro, titulada «Sugerencia de funciones para iPod Classic: ‘Modo aleatorio priorizado'», era un modelo de deferencia educada.

Hola a todos, he sido un miembro devoto de la familia Apple durante más de 15 años, y mi iPod Classic de 160GB sigue siendo mi dispositivo más utilizado. El diseño y el software son atemporales, y me gustaría agradecer a los equipos que construyeron y mantuvieron un producto tan maravilloso. Como desarrollador de software, recientemente tuve una idea para una función que daría nueva vida a las vastas bibliotecas que muchos de nosotros hemos ido creando a lo largo de los años. Lo llamo ‘Modo aleatorio priorizado’. El concepto es sencillo: un modo aleatorio que solo reproduce canciones de 5 estrellas que el usuario no haya escuchado en un periodo especificado (por ejemplo, 6 meses o 1 año). Sería una forma fantástica de revivir favoritos olvidados y hacer que las grandes bibliotecas vuelvan a sentirse frescas. Me encantaría implementar yo mismo un prototipo de esto. Mi pregunta para la comunidad y para cualquier representante de Apple aquí es: ¿Existe alguna forma oficial y autorizada para que los desarrolladores accedan al firmware del iPod o una API relevante para experimentar añadiendo nuevas funciones como esta? Gracias por su tiempo y por crear los productos que nos encantan. Saludos, Adam.

Pulsó el botón de «Publicar» y sintió alivio. Lo había hecho bien. Había sido el vendedor idóneo de su idea, ofreciendo valor y abriendo puertas. Las respuestas iniciales fueron alentadoras. Un usuario llamado «iPodFan82» escribió: «¡Es una gran idea! ¡Me encantaría eso para mi propia biblioteca!» Otro, «ClassicRockr», añadió: «Vaya, llevo años queriendo algo así.» Un pequeño destello esperanzador de comunidad.

Luego vino una versión más cínica de «MacHead_Realist»: «Tío, es un dispositivo de hace 15 años. Lo dejaron de fabricar hace años. No están añadiendo funciones. Sigue soñando.»

Adam estaba escribiendo una respuesta cuando apareció una nueva publicación. Era de un usuario con un logo corporativo azul corporativo de Apple como avatar. El nombre de usuario era «Apple_Kyle».

La respuesta fue alegre, educada y absolutamente devastadora.

¡Gracias por tu comentario! Siempre nos alegra escuchar ideas de nuestra apasionada comunidad. El iPod Classic es un dispositivo ya desfasado muy querido. Aunque ya no recibe actualizaciones de funciones, te animamos a explorar las últimas innovaciones en Apple Music para una experiencia de escucha dinámica.

Adam se quedó mirando las palabras: «comunidad apasionada». «Dispositivo obsoleto muy querido». El lenguaje era una almohada suave y corporativa, diseñada para ahogar su idea sin hacer ruido. Su sugerencia no fue rechazada, fue ignorada. Su dispositivo no era antiguo, era «obsoleto». Su pasión no era un recurso que se pudiera aprovechar, era un sentimiento que debía reconocerse para después redirigirle de nuevo a la línea de productos actual que estaban en el mercado.

Y entonces llegó el golpe final. Debajo de la publicación de Apple_Kyle, apareció una nueva línea de texto en cursiva gris:

Hilo cerrado. Para solicitudes de funcionalidades, por favor utilice el portal oficial de comentarios.

Tema cerrado.

La conversación había terminado. El destello de comunidad se extinguió. Adam sintió un frío estremecimiento, del tipo que siente un empleado leal cuando de repente le rechazan la tarjeta en la puerta. No lo despidieron simplemente, había sido silenciado. Su lealtad, su creatividad, sus años de evangelización no remunerada, no significaban nada. No era un compañero. No era familia. Su contribución no solo era no deseada, sino que era una conversación que ni siquiera se permitía. Había sido despedido de forma educada, eficiente e irrevocable.

Parte 4: La revelación

El despido amable en el foro no apaciguó a Adam. Eso le radicalizó. La informal jerga corporativa de «Apple_Kyle» fue un desafío lanzado. Todos esos años de lealtad y su creencia en la «magia» ahora le parecían una larga y lenta estafa. Se sentía alienado, enfadado y poseído por un pensamiento singular y desafiante: es solo software. Es mi dispositivo. Lo haré yo mismo.

Dio la espalda a los canales oficiales y descendió al subsuelo digital. Sus días y noches se confundían en una neblina obsesiva de investigación alimentada por la cafeína. Ya no era un aficionado. Era arqueólogo, excavando para encontrar una entrada a una tumba sellada.

Sus búsquedas le llevaron a los rincones más grises de internet, a comunidades de hackers y manitas que llevaban años desmontando los muros de Apple. Encontró sitios web y wikis llenos de conocimiento arcano, un repositorio de textos prohibidos. Aprendió las maneras secretas necesarias para comunicarse directamente con su iPod, saltándose el intermediario de iTunes. Aprendió sobre el modo DFU – Actualización de Firmware del Dispositivo – un estado de bajo nivel que fue el primer paso para tomar el control.

Tras un tutorial complejo y de varios pasos, mantuvo pulsados los botones MENÚ y SELECT durante exactamente doce segundos. La pantalla del iPod se puso negra. Lo había conseguido. Su ordenador, que antes saludaba al dispositivo con el icono amigable de iTunes, ahora lo veía como un dispositivo USB desconocido. Fue una pequeña victoria, pero la sintió trascendental.

Descargó las extrañas herramientas para la línea de comandos mencionadas en la red. Encontró enlaces a los propios servidores de Apple, que alojaban los archivos de firmware .ipsw en bruto. Por un momento, la esperanza surgió. Estaba dentro. Iba a entrar en sus entrañas.

Pasó horas en el mundo de la línea de comandos, escribiendo comandos crípticos, intentando enviar fragmentos del firmware al dispositivo, esperando encontrar una costura, una grieta que pudiera explotar. Consiguió que el dispositivo mostrara el logo de Apple, seguido de una pantalla de «No desconectar», indicando que estaba manipulando el proceso de arranque. Pero nunca llegó más lejos. La lógica central, el código real del sistema operativo que determinaba lo que significaba «Aleatorio», seguía siendo un bloque sólido e impenetrable de código binario compilado. Ninguna herramienta podía traducir los unos y ceros de la máquina al lenguaje legible para humanos del código fuente.

La misión no terminó con un estruendo, sino con un suspiro. Tras una semana de noches sin dormir y callejones sin salida, se dejó caer en la silla, mirando el rectángulo plateado inerte sobre su escritorio. La revelación llegó en el aplastante silencio de su fracaso.

La «magia» que había evangelizado durante una década era el muro mismo. La experiencia de usuario elegante y fluida, la simplicidad de «simplemente funciona» — todo se basaba en una regla no escrita: no tienes derechos. La belleza del dispositivo residía en su sello perfecto, una pieza de museo bajo un cristal de protección. Su genialidad era la genialidad de su propia impenetrabilidad.

La traición que sentía era profunda, pero ahora comprendía su verdadera naturaleza. No era una función maliciosa. No era un error. Era el diseño fundamental del sistema. Había comprado un objeto físico, un aparato que sostenía en la mano, pero no había tenido ningún control sobre el software que le daba vida. Se le prohibió estudiarlo, se le prohibió modificarlo y mejorarlo. La empresa no era su socio. Era su mando. El hermoso jardín que tanto había admirado era, de hecho, una prisión muy sofisticada y cómoda.

Parte 5: La confrontación

La guerra había terminado. Adam había perdido. Su ambición de contribuir, mejorar, participar, estaba muerta. Solo quedaba el deseo de escapar. Miró el reluciente iPod plateado y la biblioteca perfectamente organizada de iTunes en su pantalla, y no sintió nada más que el frío peso del encierro. Decidió quemar todo el edificio. Abandonaría el ecosistema Apple, liberaría su música y empezaría de cero.

Su primera y tarea más importante fue exportar la biblioteca —fruto de quince años de meticulosa recopilación— la obra de su vida.

Abrió iTunes, fue al menú Archivo y seleccionó biblioteca, luego Exportar lista de reproducción. Guardó el archivo y lo abrió en un editor de texto. Era un archivo XML, una lista de metadatos perfectamente estructurada. Pero no contenía música. Era solo una lista de punteros a los archivos de canciones, cuyas ubicaciones estaban codificadas en la ruta específica de su Mac. Era inútil en cualquier otra máquina o con cualquier otro software: un mapa sin territorio.

Intentó otra manera. Encontró la opción «Consolidar archivos», que prometía reunir toda su música en una sola carpeta. Lo ejecutó. Horas después, miró el resultado: un laberíntico caos de carpetas, miles de archivos duplicados y, lo peor de todo, un rastro de metadatos corruptos. Las canciones estaban mal etiquetadas. Faltaba la portada del álbum. Sus preciadas valoraciones de cinco estrellas, sus reproducciones, el campo «Fecha añadida» que anclaba cada canción a un momento concreto de su vida: todo estaba mezclado o desaparecido. El alma misma de su biblioteca había sido arrancada.

El desencanto técnico provocó un colapso emocional total. Se desplomó sobre el teclado, mirando los restos en la pantalla. Las filas limpias y ordenadas de su biblioteca de iTunes se habían convertido en un barrio marginal digital, un monumento a su devoción desperdiciada.

Habló en voz alta a la habitación vacía, su voz fue un susurro áspero.

«No fui su compañero. Era su prisionero.»

Se apartó del escritorio, paseando por la pequeña sala. «Todo este tiempo… quince años… valorar mis canciones, hacer mis listas de reproducción… No estaba recopilando una biblioteca. Estaba construyendo mi propia prisión, ladrillo a ladrillo. No les importan mis ideas. No les importa mi música.» Se detuvo y miró el iPod, objeto de traición. «Solo les importa que no pueda irme. Simplemente un número sin valor. Solo otro usuario encerrado en su jardín.» Era la claridad cruda y dolorosa de Willy Loman dándose cuenta de que la obra de su vida no le había valido más que un pequeño retiro.

Derrotado, hizo una última y desesperada búsqueda en internet de una herramienta de terceros, cualquier cosa que pudiera salvar sus datos. Hizo clic en un enlace a una antigua entrada de blog en un foro tecnológico de nicho. El título era «Sobre la libertad del software.»

La publicación empezaba con una historia. «Si alguna vez te has sentido impotente ante tu propia tecnología», leyó, «tienes que leer la historia de Richard Stallman y la impresora láser Xerox.»

Adam leyó la historia real sobre un programador del MIT en los años 80 que se frustraba por una impresora que se atascaba constantemente. Leyó sobre cómo este programador, llamado Stallman, quería añadir una función de software sencilla para notificar a los usuarios del atasco, pero fue bloqueado porque el fabricante se negó a compartir el código fuente. Leyó sobre el acuerdo de confidencialidad, la negativa egoísta a cooperar y la impotencia de un programador hábil al que se le niega la capacidad de arreglar sus propias herramientas.

Un escalofrío recorrió a Adam como una corriente eléctrica al reconocerse en esa historio. Es la misma historia. Dios mío, es la misma historia.

La entrada del blog concluía explicando la filosofía que surgió de esa frustración. Enumeraba, en una simple lista con viñetas, las Cuatro Libertades Esenciales del Software Libre de Richard Stallman.

Adam las leyó, y cada una impactó como un martillo, dando nombre y forma a la injusticia que acababa de sufrir.

  • La libertad de ejecutar el programa como desees, para cualquier propósito (libertad 0).
  • La libertad de estudiar cómo funciona el programa y cambiarlo para que haga tu computación como quieras (libertad 1). El acceso al código fuente es una condición previa para esto.

«Mi idea de ‘modo aleatorio priorizado'», pensó, con el corazón latiendo con fuerza. «Eso es todo lo que quería. Estudiarlo. Para cambiarlo. Para que mi propio dispositivo funcione mejor para mí.»

  • La libertad de redistribuir copias para poder ayudar a otros (libertad 2).
  • La libertad de distribuir copias de tus versiones modificadas a otros (libertad 3). Hacer esto permite que toda la comunidad se beneficie de tus cambios.

«Podría haberlo compartido», se dio cuenta. «Las otras personas en el foro… Lo querían. Podríamos haberlo construido juntos. Podríamos habernos ayudado mutuamente.»

Fue una revelación. El problema no era Apple. El problema era toda la filosofía del software privativo. Era un sistema construido no sobre el empoderamiento, sino sobre el control. Un sistema que, por su propia naturaleza, trataba a sus usuarios no como iguales, sino como sujetos. Ahora entendía que era un sistema de poder injusto.

Parte 6: El Réquiem

La muerte fue total. No la muerte del iPod, sino la muerte de la fe de Adam. La muerte de su lealtad a la «magia», la muerte de su identidad como «el tipo de la Manzana». Lo que siguió no fue duelo, sino una excavación silenciosa y decidida.

Transcurrieron meses. El trabajo constante y concentrado de la liberación reemplazó la ira frenética. El escritorio de Adam ya no era una escena de frustración, sino un yacimiento arqueológico.

Había descubierto un mundo de software libre. Envió a MusicBrainz Picard los miles de archivos recuperados, esperando una larga noche de etiquetados. En cambio, recibió una lección. El software comenzó su trabajo, pero surgió un patrón escalofriante. Era ordenar la colección de su vida en dos montones distintos.

La primera pila —los archivos en formato .m4a, su música desde aproximadamente 2009— fue «liberada». El software los etiquetaba, corregía sus metadatos y los restauraba en su nueva biblioteca.

El segundo montón era un cementerio digital. Los archivos .m4p. Su música más temprana. Picard no podía tocarlas. Intentó abrir uno. Apareció un mensaje de error. Estaban bloqueados con DRM. Inútil. No había sido un coleccionista, había sido inquilino.

Se centró en su otra tarea, escribiendo sus propios scripts en Python para analizar los archivos XML rotos. Esto solo hizo más daño. El script funcionaba perfectamente, recuperando sus escuchas perdidas y el número de reproducciones para todo. Ahora poseía un contorno perfecto y fantasmal de su biblioteca: una base de datos de recuerdos entrañables de canciones de las que estaba permanentemente excluido.

No fue una resurrección. Era un funeral por la música que le habían engañado para alquilar. Y de sus cenizas, nació una nueva determinación. No podía resucitar el cementerio digital de archivos .m4p, pero podía reemplazarlos por algo nuevo.

Fue a su armario y sacó viejas carpetas y vitrinas de joyas, la fuente física de una colección de vida. Entonces comenzó el tedioso trabajo. Cruzaba la entrada fantasmal de un álbum .m4p muerto en su base de datos y luego buscaba en sus medios físicos su contraparte de plástico y papel.

Instaló un software de extracción de autio de software libre, estableció la salida en formato FLAC —un códec de audio libre y sin pérdida— y comenzó el meticuloso trabajo de rellenar los huecos. Uno a uno, fue introduciendo los CDs específicos en la unidad. El trabajo era lento y manual, un acto meticuloso de archivo y reparación. Era todo lo contrario de la compra «sin interrupciones» con un solo clic que antes valoraba.

Pero con cada hueco que llenaba, con cada archivo bloqueado que reemplazaba por una versión FLAC perfecta, bit por bit, sentía una creciente sensación de poder. Era un artesano, reforzando su casa donde las paredes se habían podrido, reconstruyéndola a su manera.

La escena final de su transformación ocurrió en una tranquila tarde de sábado. En su escritorio estaba su viejo iPod Classic de 160GB, pero no era el mismo dispositivo. Había realizado el acto final de liberación: había instalado Rockbox.

Lo encendió. La interfaz animada y elegante de Apple, con su portada flotante y bonitos degradados, había desaparecido. En su lugar había un menú sencillo basado en texto sobre un fondo negro liso. La fuente era funcional, la navegación directa. No había «magia». Pero había algo mejor: transparencia. La antigua interfaz era una pintura preciosa que solo podía admirar desde lejos. La nueva era un taller sencillo pero completamente surtido, y le habían dado las llaves. Le ofrecía cosas que Apple nunca haría: reproducción FLAC nativa, un ecualizador parametrizable de 10 bandas, fundido de canciones avanzado y una serie de complementos y juegos creados por la comunidad.

Abrió el navegador de archivos —su navegador, no una biblioteca seleccionada— y seleccionó una canción. Mientras escuchaba, notó un pequeño problema. En la pantalla de «Ahora en reproducción», el texto del número de pista estaba ligeramente desalineado, sobreponiéndose con otro elemento en un solo píxel.

Hace un año, esto habría sido un problema sin importancia. Ahora, sonrió.

Se giró hacia su ordenador y abrió una carpeta titulada «código fuente de rockbox». Dentro estaba todo el código fuente del sistema operativo que estaba ejecutando. Abrió un archivo C en un sencillo editor de texto. El código estaba todo ahí: complejo, pero legible, comprensible. Pasó una hora siguiendo la lógica de renderizado, encontró la línea que calculaba la posición del texto y realizó una pequeña corrección: un solo cambio de carácter.

Guardó el archivo, ejecutó el compilador y copió la nueva versión del firmware en su iPod. Lo reinició. Volvió a la pantalla de «Ahora en reproducción». El texto estaba perfectamente alineado. El problema había desaparecido.

Sintió una satisfacción silenciosa y profunda que eclipsaba cualquier deleite que hubiera sentido con una nueva función «mágica» de Apple. Redactó un correo breve y directo a la lista pública de correo para desarrolladores de Rockbox.

Hola equipo, he notado una pequeña superposición de texto en la pantalla de Reproduciendo Ahora. Adjunto hay un parche que corrige el cálculo de coordenadas. Gracias por todo vuestri trabajo en este increíble proyecto. -Adam

Adjuntó el pequeño archivo de texto con su cambio y pulsó Enviar.

Una hora después, apareció una notificación en su ordenador. Era una respuesta de alguien que nunca había conocido, probablemente al otro lado del mundo. El mensaje era sencillo, directo y carente de cortesías corporativas.

Buen apunte. Aplico el parche. Gracias, Adam.

Adam cerró los ojos y se recostó en la silla. Las dos palabras que había anhelado de Apple_Kyle, la validación que buscaba por su lealtad, finalmente llegaron de un desconocido. Gracias, Adam. Ya no era un prisionero en el jardín de otra persona. Era un colaborador.

Era libre.

Un dibujo en dos viñetas. En la primera se ve a una persona triste intentando leer un código, pero no puede porque no es software libre.

victorhck

Ilustración con el texto "Software libre. Sociedad libre" y 4 iconos que representan las cuatro libertades que promulga y ofrece el software libre: Ejecución, inspeccionar el código, compartirlo y modificarla compartiendo las modificaciones

Un dibujo en dos viñetas. En la primera se ve a una persona triste intentando leer un código, pero no puede porque no es software libre.

GrapheneOS migra sus servidores fuera de Francia por no ser seguro para «proyectos de privacidad de código abierto

25 Noviembre 2025 at 14:42
Por: victorhck

El proyecto GrapheneOS ha anunciado en la red social del Nazi Elon Musk que cesa todas las operaciones en Francia, afirmando que el país ya no es seguro para los «proyectos de privacidad de código abierto».

Imagen: Antolin

Según leemos en la Wikipedia:

GrapheneOS es un sistema operativo móvil de código abierto basado en Android desarrollado como un proyecto sin fines de lucro que se enfoca en la privacidad y seguridad. GrapheneOS realiza mejoras sustanciales tanto en la privacidad como en la seguridad a través de muchas características cuidadosamente diseñadas para funcionar contra adversarios reales. Originalmente era conocido como Android Hardening hasta marzo de 2019.​

GrapheneOS es un proyecto que ofrece un sistema operativo basado en Android para dispositivos Pixel creado en 2014 por el desarrollador Daniel Micay, con el objetivo de liberar a las personas que lo utilizan del control y espionaje del sistema operativo desarrollado por Google.

Y han comunicado que migrarán todos los servidores que tenían en Francia a otras ubicaciones más seguras para el proyecto. Lo han comunicado también en su propio nodo del Fediverso:

Aunque el sistema operativo seguirá disponible para los usuarios franceses, todos los servidores web y de discusión se están trasladando al extranjero.

Hasta ahora, el proyecto dependía de OVH Bearharnois, un proveedor francés de alojamiento, para su sitio web principal y servicios de redes sociales. El plan de migración traslada las instancias de Mastodon, Discourse y Matrix a una combinación de servidores locales y compartidos en Toronto. La infraestructura crítica de sitios web será alojada por Netcup, una empresa alemana.

GrapheneOS está desarrollado para no recopilar los datos confidenciales de los usuarios en sus servidores ni almacena infraestructuras críticas en Francia. Por lo tanto, la migración no afecta a servicios como la verificación de firmas ni la protección contra degradaciones para actualizaciones.

Citando el apoyo del gobierno a la propuesta de Control de Chat de la Unión Europea, los desarrolladores de GrapheneOS también se niegan a viajar a Francia. Ya no se permite a los promotores trabajar dentro del país por motivos de seguridad.

Esta decisión fue provocada por una cobertura negativa en la prensa de dos artículos publicados por Le Parisien. Una entrevista con la fiscal francesa de ciberdelitos Johanna Brousse insinúa posibles acciones legales contra el proyecto:

«Con esta nueva herramienta, hay una legitimidad real para una parte de los usuarios en el deseo de proteger sus intercambios. Por tanto, el enfoque es diferente. Pero eso no nos impedirá demandar a los editores si se descubren vínculos con una organización criminal y no cooperan con la ley»

GrapheneOS sostiene que Le Parisien ha confundido su proyecto con forks patrocinados por el gobierno, que son copias falsas de su sistema operativo. El medio de comunicación se refiere a una aplicación falsa de Snapchat, publicidad en la dark web y una serie de vídeos no listados de YouTube que no son propios de GrapheneOS en sí.

El proyecto había amenazado previamente con litigios contra estas ramificaciones del proyecto patrocinadas por el gobierno. Un ejemplo destacado es ANOM, una empresa pantalla respaldada por el FBI que desarrolló un sistema operativo Android y una plataforma de mensajería comprometidos como parte de la Operación Trojan Horse entre 2018 y 2021.


Este artículo es una traducción/adaptación de un artículo en inglés publicado bajo licencia CC-by-sa 4.0 en la web PrivacyGuides.org que puedes leer en este enlace:

El proyecto ha comunicado que Francia ya no es un lugar seguro:

Francia no es un país seguro para proyectos de privacidad de código abierto. Esperan puertas traseras en cifrado y también en el acceso a dispositivos. No se permitirán dispositivos y servicios seguros. No nos sentimos seguros usando OVH ni siquiera para una web estática con servidores en Canadá/EE. UU. a través de sus filiales Canadá/EE. UU.

Ya el proyecto tiene una historia con contratiempos y problemas ocasionados en estos años debido a otros problemas a la hora de poner en marcha el proyecto:

victorhck

Leí los términos del servicio de mi Smart TV y ahora duermo con un ojo abierto

24 Noviembre 2025 at 11:42
Por: victorhck

Un horror por el que pasamos inadvertidos. Aquí traigo mi ejemplo para que vosotros y vosotras podáis escapar si aún estáis a tiempo…

Fotograma de la película 1984 en el que se ve al protagonista sentado en un rincón donde no puede verle el gran hermano, que aparece en una telepantalla gigante que todo lo observa

Fue un momento hermoso. El equipo que me lo llevó a casa, como dos ángeles benévolos con polos a juego, acababan de montar mi nuevo MegaCorp Glimmer-Screen 9000 en la pared.

Era un elegante monolito de obsidiana con una resolución pura de 8K, tan delgado que parecía desafiar las leyes de la física. Prometía un mundo de transmisión fluida, comodidad activada por voz y una imagen tan clara que podría contar los poros del rostro de un presentador de noticias desde el otro lado de la habitación.

Estaba enamorado. Esto no era solo una televisión. Era una ventana al futuro. La encendí y la pantalla se encendió con un timbre acogedor que sonaba sospechosamente como una caja registradora.

Luego llegó la pantalla de configuración. Contraseña Wi-Fi, inicios de sesión de servicios de streaming y para finalizar el proceso… el jefe final de la tecnología moderna: los Términos de Servicio.

Normalmente, hago lo que cualquier persona cuerda hace. Me desplazo hasta el final a la velocidad de la luz, marco la casilla «He leído y estoy de acuerdo» con la temeridad de alguien que firma un paquete, y sigo con mi vida. Pero ese día, algo era diferente. Un extraño sentido de deber cívico, o quizá un estallido de cafeína en mal momento, me invadió. «No», pensé, «Hoy seré una persona informada.»

Ese fue mi primer, y posiblemente el último, error.

Lo que siguió fue un descenso hacia un corazón de oscuros términos legales de tinieblas. Soy un hombre cambiado. He visto cosas. Aquí, por si te puede servir de ayuda, tienes un resumen de las cláusulas que han convertido mi santuario cinematográfico en un panóptico de paranoia.

Cláusula 7, Sección B, Subsección IV: El Ojo que todo lo ve

Jerga legal: «Al aceptar estos términos, concedes a MegaCorp y sus afiliados una licencia perpetua, mundial y libre de regalías para monitorizar, grabar y analizar todo lo que se muestre en tu Glimmer-Screen 9000 con fines de aseguramiento de calidad, optimización de contenido y publicidad dirigida.»

Traducción: Mi tele no solo me está mostrando películas; las está viendo conmigo. Y juzga mis decisiones. Sabe que vi tres temporadas seguidas de ese terrible reality show de citas. Me emocioné con esa comedia romántica tan cutre. Está registrando silenciosamente mi dudoso gusto por los documentales nocturnos sobre el concurso de hacer queso. Mi tele es mi nueva compañera de piso, la más crítica.

Cláusula 12, Sección F: El compañero de escucha

Jerga legal: «Para mejorar la función de comandos de voz, el conjunto de micrófonos incorporado puede permanecer en estado de escucha activa para captar audio ambiental, fragmentos conversacionales y otros datos acústicos. Estos datos pueden ser transmitidos a nuestros servidores para su procesamiento mediante nuestros algoritmos privativos.»

Traducción: El mando a distancia es un espía. La propia televisión es un espía. Mi salón ahora es una embajada con micrófonos en un thriller de espionaje de bajo presupuesto. Anoche, mi mujer y yo tuvimos una discusión entre susurros sobre si la piña debería permitirse en la pizza. Esta mañana, la línea de tiempo en mis redes sociales era un muro de anuncios de pizzas congeladas con temática hawaiana. ¿Coincidencia? CREO QUE NO.

Ahora comunico información sensible mediante una serie de gestos intrincados con las manos y notas garabateadas apresuradamente en un Etch A Sketch. La tele no puede leer mis garabatos frenéticos. Eso espero.

Cláusula 28, Sección A: La Cláusula del Dominador Digital

Jerga legal: «MegaCorp se reserva el derecho de entregar actualizaciones obligatorias y no revocables de firmware a su dispositivo en cualquier momento, sin previo aviso. Estas actualizaciones pueden alterar, eliminar o modificar de otro modo la funcionalidad, características y aplicaciones compatibles del dispositivo a nuestra exclusiva discreción.»

Traducción: me fui a la cama con una tele que tenía mi app de streaming favorita fijada en la pantalla de inicio. Me desperté y descubrí que había sido reemplazado por «Qwik-Flix», un servicio del que nunca había oído hablar y que solo retransmite tutoriales de banjo de dominio público.

Los botones de volumen de mi mando ahora controlan el termostato inteligente del piso de mi vecino. Esta no es mi tele; es una cocina de pruebas tecnológica, y yo soy el beta tester. Vivo en un estado de cambio perpetuo y no anunciado.

Cláusula 42: La Proclamación de «No posee nada»

Jerga legal: «El Glimmer-Screen 9000 y su software embebido están licenciados, no vendidos. Se le concede una licencia limitada, no transferible y revocable para usar el dispositivo únicamente con el propósito de ver transmisiones aprobadas por MegaCorp.»

Traducción: no tengo televisor. Tengo una pantalla costosa montada en la pared que MegaCorp me permite usar amablemente. Soy inquilino en mi propio salón. Tengo la sospecha de que si me pierdo un pago de mi plan «TV-como-servicio» (una función que aún no han anunciado, pero que seguro que llegará), un equipo de recuperadores con equipo de combate bajará por mi chimenea y recuperará su pantalla.

Así que ahora vivo con miedo. Cubro el televisor con una manta gruesa cuando está apagada, para que su siniestro sensor que no parpadea no me observe mientras duermo. Empecé a referirme a él sólo en susurros, como «El Monolito». Mi perro ya ni siquiera entra a la habitación; se queja en la puerta, sintiendo el aura opresiva de la vigilancia.

Por supuesto, todo esto es una sátira. En su mayor parte. No tengo esposa. O una televisión que me espía. Pero la aterradora verdad es que el núcleo de estas «cláusulas» existe en las interminables páginas de términos que la gente acepta todos los días. Están cambiando la libertad y privacidad de su software por conveniencia y pantallas brillantes. Están instalando espías en sus hogares y pagando por ese privilegio.

Entonces, ¿cuál es la solución? Tal vez es hora de que exijamos una «TV de software libre», una en la que controlemos el código, decidamos qué escucha y seamos dueños de nuestras propias salas de estar. Hasta entonces, estaré aquí, con mi sombrero de papel de aluminio y cuidándome las espaldas. El Monolito siempre está mirando.


Este texto es una traducción del inglés de un artículo escrito por Jason Self en su página web que puedes encontrar en este enlace y publicado bajo licencia libre y con su permiso:

Puede parecer una sátira exagerada, pero cabe recordar que la realidad supera la ficción y las nuevas formas de «extorsión» de muchas empresas a sus clientes crecen en imaginación y nuevas formas.

Ya hace 8 años publiqué en el blog un artículo que traigo aquí ya que empasta directamente con lo expresado en la ficción del relato:

Seamos conscientes y rechacemos las nuevas formas de espionaje y pérdida de privacidad que suponen cietos aparatos electrónicos que aceptamos como inavitables, cuando no lo son.

¿Cual es tu opinión? usa los comentarios del blog para compartirla…

Imagen de una radiografía de una cabeza en la que se ven dos cámaras de seguridad dentro y un texto que dice: Think while it's still legal

victorhck

Fotograma de la película 1984 en el que se ve al protagonista sentado en un rincón donde no puede verle el gran hermano, que aparece en una telepantalla gigante que todo lo observa

Imagen de una radiografía de una cabeza en la que se ven dos cámaras de seguridad dentro y un texto que dice: Think while it's still legal

El falso dilema entre proteccionismo y libre comercio

23 Noviembre 2025 at 08:00
Por: Nuria

Retrato oficial de Donald Trump. 2025

Artículo original publicado en jacobinlat por Luciana Ghiotto. Attac Argentina

El segundo gobierno de Donald Trump parece haber modificado el tablero del comercio global. La administración trumpista puso el foco en el libre comercio porque lo entiende como una práctica que ha dañado la hegemonía de Estados Unidos al generar desbalances comerciales con sus socios (especialmente China). Desde esa perspectiva, los altos aranceles podrían ayudar a recuperar parte del poderío industrial y económico perdido con la globalización. «La palabra más bonita del diccionario es arancel», decía Trump en 2024, y desde su asunción en enero hemos entendido que no estaba exagerando.

En este artículo nos proponemos examinar las políticas arancelarias de Trump desde una perspectiva crítica, trascendiendo las interpretaciones predominantes que las presentan como una ruptura radical con el orden económico global previo. Nuestra investigación se estructura en torno a tres objetivos fundamentales. Primero, desarrollar un análisis riguroso sobre la naturaleza, alcance e historicidad de las transformaciones generadas por las políticas arancelarias trumpistas, situándolas en la trayectoria más amplia de las relaciones entre Estado y capital en el capitalismo contemporáneo.

Segundo, problematizar críticamente la concepción dominante del «libre comercio», interrogando si las políticas proteccionistas actuales representan una verdadera ruptura con el paradigma librecambista o si constituyen, más bien, una reconfiguración de los mecanismos de acumulación dentro de la misma lógica sistémica. Tercero, examinar las implicaciones de estas transformaciones para los movimientos sociales que han articulado sus estrategias en torno a la crítica del libre comercio durante las últimas tres décadas, evaluando los desafíos que este nuevo escenario plantea para sus marcos interpretativos y prácticas políticas.

Sostenemos que una lectura crítica del momento actual resulta fundamental para repensar las estrategias de los movimientos sociales, particularmente en lo que respecta a su relación con los Estados nacionales y a las formas de construir solidaridades transnacionales efectivas. Las transformaciones en curso exigen reconsiderar tanto los sujetos políticos protagonistas de las resistencias como las escalas en que estas deben articularse para confrontar un sistema cuyas contradicciones se manifiestan simultáneamente en múltiples niveles.

Rupturas y continuidades en el modelo económico estadounidense

Las políticas proteccionistas de Trump no son una anomalía histórica sino un retorno a estrategias fundamentales en la construcción de Estados Unidos como potencia industrial. Contrariamente a la narrativa liberal dominante, este país desarrolló su economía bajo un intenso proteccionismo durante el siglo XIX, con aranceles que superaban el 40% hasta la Segunda Guerra Mundial. Lejos de representar una «desviación» del libre comercio, esta medida era una herramienta para gestionar asimetrías de poder económico, permitiendo a las potencias emergentes acumular capacidad industrial antes de competir globalmente. La Gran Depresión de 1930 intensificó el proteccionismo con la ley Smoot-Hawley, que elevó aranceles a niveles históricos. Esta crisis representó más que una recesión económica: fue una crisis orgánica del capitalismo donde el proteccionismo funcionó como mecanismo de emergencia para contener el cataclismo dentro de las fronteras nacionales y facilitar la reestructuración de las relaciones capital-trabajo.

El New Deal de Roosevelt supuso la masiva intervención estatal, con inversiones en infraestructura, subsidios industriales y regulación financiera, mientras la Segunda Guerra Mundial justificó una planificación económica centralizada que consolidó el complejo militar-industrial estadounidense. Tras la guerra, el capital de base estadounidense se internacionalizó, lentamente, pero sin pausa. La reconstrucción de Europa y su proceso de integración regional con la nueva Comunidad Europea promovió el aumento de la inversión extranjera directa a ese territorio. En ese mismo periodo se crearon en México las primeras maquiladoras con capital estadounidense, cuando en 1965 el gobierno mexicano implementó el Programa de Industrialización Fronteriza. Para 1970 ya existían 132 maquiladoras en la zona de frontera con Estados Unidos.

Paralelamente, durante estos años aumentaron las protestas sindicales en los países industrializados (con eventos como Mayo Francés y el Otoño Caliente italiano), expresando la insubordinación obrera a los dictados del capital y contribuyendo a la caída de la tasa de ganancia a principios de los años setenta. A este proceso deben añadirse también los procesos de lucha en América Latina, como el Cordobazo argentino, las huelgas del ABC paulista o la masacre estudiantil de Tlatelolco, todo en el contexto de la revolución cubana como horizonte de posibilidad de cambio sistémico.

La liberalización comercial se intensificó con la Ronda Kennedy del GATT (1964-1967), que incluyó no solo aranceles sino también barreras no arancelarias, expandiendo el ámbito regulatorio para satisfacer las necesidades de un capital que se volvía lentamente transnacional. Esta trayectoria culminó con la Ronda Uruguay (1986-1994) y la creación de la Organización Mundial del Comercio (OMC), que extendió radicalmente el alcance regulatorio a áreas como la propiedad intelectual, las inversiones extranjeras, los servicios y las compras gubernamentales.

En este proceso, Estados Unidos actuó como arquitecto principal, impulsando la liberalización en sectores en los que sus corporaciones tenían ventajas (servicios, propiedad intelectual, finanzas) mientras preservaba protecciones en áreas sensibles (agricultura, textiles, acero). Esta estrategia dual —«haz lo que digo, no lo que hago»— permitió al país norteamericano posicionarse como un defensor del libre comercio mientras mantenía elementos proteccionistas en su política doméstica, tales como subsidios encubiertos, compras gubernamentales discriminatorias y medidas antidumping.

Navegando esta dualidad, Estados Unidos se posicionó como el principal defensor y promotor del discurso y la práctica del libre comercio a escala global. Los distintos gobiernos emplearon su influencia diplomática, económica y militar para impulsar la liberalización en aquellos sectores donde sus corporaciones mantenían ventajas competitivas. La transformación del GATT en OMC y la expansión cualitativa del ámbito regulatorio que esto implicó respondió fundamentalmente a esta agenda impulsada por Estados Unidos y sus corporaciones transnacionales, que buscaban instrumentos jurídicos más fuertes para garantizar condiciones favorables para la penetración en los nuevos mercados.

La globalización como reestructuración cualitativa

Siguiendo esta línea, los años noventa no representaron el «nacimiento» de la globalización, sino una nueva disposición de las relaciones entre los Estados nacionales y el mercado mundial, caracterizada por la expansión geográfica de las relaciones capitalistas, el aumento de la inversión extranjera directa y la incorporación de nuevos territorios a los circuitos globales de acumulación. Este periodo no significó una ruptura absoluta con el pasado, sino que expresó una reconfiguración de las relaciones sociales capitalistas en respuesta a las contradicciones de los Estados de bienestar keynesianos.

El desplome soviético y la apertura china ofrecieron al capital acceso a vastos territorios con mano de obra barata, nuevos mercados y recursos estratégicos. Estos espacios ofrecían múltiples ventajas: enormes reservas de fuerza de trabajo disciplinada y de bajo costo, mercados potenciales para la venta de productos y servicios, oportunidades para inversiones de capital fijo en infraestructura, y acceso a recursos naturales estratégicos. Los capitales estadounidenses respondieron a estas transformaciones implementando una serie de estrategias de instalación en los nuevos territorios incorporados al mercado global. En China, adoptaron principalmente la forma de inversión productiva directa en sectores manufactureros intensivos en trabajo, instalando plantas en las Zonas Económicas Especiales.

Esta expansión geográfica de las empresas estadounidenses (y europeas) implicó la transformación cualitativa en la organización del capitalismo global. Facilitó la conformación de un entramado productivo transnacional que profundizaba el proceso de relocalización industrial iniciado en los años sesenta. Las cadenas globales de valor emergieron como la forma organizativa dominante, permitiendo a las corporaciones transnacionales fragmentar los procesos productivos y distribuirlos a través de múltiples territorios para maximizar las ventajas comparativas de cada territorio.

Este proceso económico tuvo su reflejo en un entramado jurídico específico, una nueva «arquitectura jurídica de la impunidad» para las corporaciones, al decir de Juan Hernández Zubizarreta. Esta arquitectura, compuesta por un conjunto de instituciones y tratados internacionales, generó una asimetría normativa articulada en torno a una idea básica: proteger a toda costa los negocios de las multinacionales mediante un ordenamiento jurídico internacional fundamentado en las reglas del comercio y la inversión.

Se conformó, entonces, una lex mercatoria compuesta por miles de normas: contratos de explotación y comercialización, tratados comerciales bilaterales y regionales, acuerdos de protección de las inversiones, políticas de ajuste y préstamos condicionados, laudos arbitrales, etc. Un derecho duro (hard law) (coercitivo y sancionador) que protege con fuerza los intereses empresariales. Y a este entramado se sumó también la creación, en 1995, de la Organización Mundial del Comercio (OMC), institución que reúne los objetivos del libre mercado y los vuelve regla para todos los Estados.

En definitiva, la globalización no está determinada solamente por la integración económica (aunque se trata de un elemento central) ni por las innovaciones tecnológicas (esenciales para la internacionalización) ni por el nuevo entramado jurídico (clave para otorgar seguridad a la propiedad privada). Todo esto define a la globalización, marcando una fase específica de la lucha entre capital y trabajo donde el capital buscó recomponer su dominación frente a las luchas obreras de los años sesenta que habían encarecido el precio del trabajo y reducido la ganancia.

Asimismo, todas las economías que se habían mantenido semicerradas en la posguerra, durante los Estados de bienestar, fueron conectadas en el mercado global. Ya no habría más lugar para economías nacionales autonomizadas, sino que se imponía ahora la regla del mercado. La globalización, entonces, representa una estrategia ofensiva del capital para escapar de las restricciones nacionales y disciplinar a la clase trabajadora mediante la amenaza constante de relocalización y precarización. La movilidad global del capital y la desregulación financiera que caracterizan esta etapa no son más que expresiones de la crisis de la forma tradicional de dominación capitalista y su intento desesperado por restaurar la rentabilidad.

¿Trump contra el libre comercio?

La política económica de la administración Trump marcó un quiebre significativo con el consenso bipartidista «globalizador» y en favor del libre comercio que dominó la política estadounidense durante cuatro décadas. Este «neoproteccionismo» representa una forma explícita de intervención estatal que defiende selectivamente a empresas con base en Estados Unidos ofreciéndoles protección contra los competidores extranjeros. Esto revela la verdadera naturaleza del proyecto económico trumpista: no un rechazo al neoliberalismo ni al libre comercio en sí mismos, sino una reconfiguración de las relaciones entre el Estado, las corporaciones y el mercado mundial, desarrollando un nacionalismo económico con fuerte impacto en la base electoral.

Los partidos Demócrata y Republicano habían convergido en su apoyo a políticas de libre comercio, desde el TLCAN bajo Clinton hasta el TPP con Obama. Trump rompió con esta tradición, calificando al TLCAN como «el peor tratado de la historia» y forzando su renegociación entre 2017 y 2018. Hay que reconocer que Trump no estaba tan errado: el TLCAN redujo empleos en sectores industriales clave de Estados Unidos, particularmente en estados del llamado «cinturón del óxido». Se estiman pérdidas de alrededor de 700 000 puestos de trabajo estadounidenses como resultado directo del acuerdo. Este fenómeno evidencia las contradicciones inherentes a la internacionalización del capital, donde la promesa de prosperidad generalizada chocó con la realidad de una redistribución desigual de costos y beneficios.

En su primer gobierno, Trump redobló la apuesta contra las instituciones del libre comercio. En 2017 boicoteó el Órgano de Solución de Diferencias de la OMC y retiró a Estados Unidos del TPP. A su vez, impuso aranceles a China, México, Canadá y la Unión Europea, e inició una guerra comercial con China desde 2018. El demócrata Joe Biden no modificó los aranceles impuestos por Trump, sino que los mantuvo y profundizó con iniciativas como la Ley de Reducción de la Inflación, la Ley de Chips y Ciencia, y políticas de Buy American, consolidando un nuevo enfoque proteccionista bipartidista.

El proteccionismo de Trump recupera una forma explícita de intervención estatal a favor de empresas con base administrativa en Estados Unidos, cobijándolas de la competencia internacional. Literalmente, los aranceles impuestos actúan como una coraza protectora, un escudo para amplios segmentos del capital estadounidense que habían perdido ventajas competitivas frente a rivales internacionales, especialmente empresas chinas. El objetivo de las políticas de Trump es, reforzar el poder de las corporaciones estadounidenses, no limitarlo.

Asimismo, este proteccionismo es selectivo: mientras defiende sectores industriales tradicionales, desregula el sector financiero y reduce impuestos al gran capital. Implementa altos aranceles para lograr un efecto positivo en sectores manufactureros tradicionales, pero simultáneamente ejecuta una agenda de desregulación financiera que desmantela el andamiaje regulatorio construido tras la crisis de 2008. En 2018, el gobierno de Trump terminó con la Ley Dodd-Frank que había sido aprobada en 2010 para reforzar las exigencias de capital de respaldo a los bancos, obligándolos a llevar a cabo test de resistencia anuales para mostrar su fortaleza y prohibía a las instituciones financieras dedicarse a actividades de alto riesgo con el dinero de sus clientes.

Por otra parte, la Ley de Recortes de Impuestos y Empleos (Tax Cuts and Jobs Act) de 2017 representó la mayor reforma fiscal en tres décadas y constituyó el logro legislativo más significativo del primer mandato de Trump. La pieza central de esta legislación fue la dramática reducción del impuesto federal sobre la renta corporativa del 35% al 21%, un recorte sin precedentes que transformó el panorama tributario empresarial estadounidense. Los legisladores republicanos argumentaron que un entorno fiscal más favorable incentivaría a las empresas a expandir sus operaciones en Estados Unidos y las haría más competitivas en el mercado global.

La drástica reducción del impuesto corporativo reveló una profunda contradicción en el núcleo de la política económica trumpista: mientras se implementaban aranceles y restricciones comerciales bajo el discurso de proteger a los trabajadores estadounidenses, se otorgaban enormes beneficios fiscales a las mismas corporaciones multinacionales que habían relocalizado empleo durante décadas. Esta contradicción aparente revela la verdadera naturaleza del proyecto: no se trata de un retorno al proteccionismo integral del siglo XIX o del período de sustitución de importaciones, sino de una reconfiguración del rol estatal dentro del capitalismo globalizado para defender selectivamente ciertos sectores mientras se mantienen y profundizan las ventajas para el capital financiero y las grandes corporaciones.

Lo que Trump consiguió fue sincerar la relación entre Estado y capital corporativo: abandonó la pretensión neoliberal de separación entre ambos, reconociendo de manera explícita que el poder estatal sigue siendo esencial para garantizar la rentabilidad del capital estadounidense en un contexto de creciente competencia internacional. El proteccionismo trumpista, en este sentido, no es una limitación del capitalismo estadounidense sino un intento de salvarlo de su crisis de rentabilidad y pérdida de ventajas competitivas, utilizando el poder estatal como escudo para preservar posiciones privilegiadas que ya no podían sostenerse mediante la pura competencia en los mercados globales.

La contradicción fundamental del proyecto económico de Trump radica en querer capturar los beneficios de la globalización (ganancias extraordinarias, dominio tecnológico, influencia geopolítica) mientras rechaza sus consecuencias inevitables: la relocalización productiva y los impactos negativos sobre el mercado laboral doméstico. El gobierno pretende reconciliar el nacionalismo económico del siglo XX con la realidad de corporaciones cuyo poder deriva precisamente de su capacidad para operar más allá de las fronteras nacionales. Esta tensión revela que el America First económico no puede materializarse mediante un simple retorno de la producción, sino que requiere una transformación radical de las lógicas de acumulación global que estas mismas corporaciones han construido durante décadas y de las cuales depende actualmente su posición dominante en la economía mundial.

Más allá del dilema: los movimientos anti-TLC en la encrucijada trumpista

Las organizaciones sociales que tradicionalmente se han opuesto a los TLC desde una crítica al neoliberalismo ahora enfrentan un dilema: oponerse frontalmente a las políticas comerciales de Trump podría interpretarse como una defensa implícita del statu quo neoliberal; apoyarlas significaría legitimar un proyecto que, aunque nombradamente contrario al libre comercio, está diseñado para fortalecer el poder del capital estadounidense sin cuestionar las relaciones sociales de explotación y desigualdad que le subyacen.

Pero Trump se ha apropiado de la retórica anti libre comercio desde un foco diferente a las campañas contra los tratados. Es cierto que algunos puntos de su argumento son similares: la crítica a la relocalización productiva, los impactos de los TLC sobre los trabajadores, la oposición a acuerdos como el TPP y las críticas del TLCAN y la OMC. Pero esto lo hace principalmente desde una matriz nacionalista-corporativa que no cuestiona las asimetrías fundamentales del orden económico global ni incorpora demandas de justicia ambiental o laboral internacional. Por el contrario, lo que Trump reivindica es un nacionalismo económico excluyente: su objetivo no es rediscutir el rol de las corporaciones estadounidenses, sino hacerlas nuevamente fuertes. Antes que «Make America Great Again», «Make US Corporations Great Again».

Esta situación revela una crisis más profunda en los marcos interpretativos tradicionales que planteaban «libre comercio vs. proteccionismo». Se evidencia ahora la necesidad de desarrollar un análisis más sofisticado que juegue en dos niveles: por un lado, una crítica del neoliberalismo y del libre comercio, pero, por otro, una crítica radical basada en el entendimiento de cómo funciona el capitalismo en su conjunto, y cómo el tema de comercio se entreteje con los temas financieros, ambientales, digitales, productivos, etc.

Lo que el trumpismo ha puesto en crisis es la mirada centrada en el nacionalismo económico que muchos movimientos sociales han sostenido desde los años noventa, cuando el foco era la crítica al neoliberalismo. La reivindicación de la centralidad del Estado y su capacidad regulatoria se convirtió en el eje articulador de proyectos progresistas que buscaban recuperar espacios de autonomía para las políticas públicas nacionales frente al avance de la globalización neoliberal. Sin embargo, esta estrategia política ha encontrado su límite en la profunda transformación estructural que el capitalismo global ha experimentado.

El problema fundamental es que estas políticas centradas en la recuperación de la soberanía económica nacional chocan inevitablemente contra la realidad de una interconexión económica global que ha reconfigurado las bases materiales de reproducción social. El neoliberalismo no fue simplemente un conjunto de políticas reversibles mediante la voluntad estatal, sino un proceso de reorganización profunda de las relaciones de producción a escala planetaria. Las economías nacionales fueron orgánicamente integradas en cadenas globales de valor, circuitos financieros transnacionales y redes tecnológicas que reducen drásticamente el margen de maniobra para experimentos económicos autonomizados.

En este contexto, los movimientos sociales que se oponen a los tratados de libre comercio enfrentan varios desafíos. La superación del nacionalismo metodológico constituye quizás el más importante y urgente, en tanto implica trascender una visión que ha estructurado tanto el análisis como la praxis política de numerosos movimientos populares durante décadas: la centralidad incuestionada del Estado-nación como articulador del horizonte utópico y como contenedor natural de los procesos sociales.

Esto no es meramente una cuestión ideológica ni un enamoramiento con los debates históricos dentro de las izquierdas sobre el rol del Estado en los procesos emancipatorios. La crisis de este enfoque refleja las transformaciones estructurales en el capitalismo. Frente a esta realidad, la reivindicación de la soberanía económica nacional como horizonte estratégico principal resulta insuficiente. Sin embargo, reconocer los límites del nacionalismo metodológico tampoco implica abrazar un internacionalismo abstracto que ignore las asimetrías de poder entre naciones y regiones, o que desconozca la importancia que los espacios nacional-estatales siguen teniendo como terrenos de disputa política. Se trata, más bien, de desarrollar perspectivas analíticas y estrategias políticas que puedan operar simultáneamente en múltiples escalas.

Desde los años noventa, el foco político puesto en los tratados de libre comercio ha permitido visibilizar los mecanismos concretos mediante los cuales el poder corporativo transnacional se institucionalizaba y expandía. La creación de alianzas transnacionales efectivas que superen las tentaciones del nacionalismo económico sin diluir las especificidades de cada contexto constituye otro reto significativo. Hoy, la solidaridad internacional requiere la identificación de la contradicción fundamental del capitalismo contemporáneo (la cual a menudo queda invisibilizada en los análisis políticos convencionales). Efectivamente, el libre comercio no es simplemente un conjunto de políticas erróneas, sino un mecanismo estructural que produce necesariamente sectores «sacrificables» cuya exclusión y precarización no es un efecto colateral, sino una condición constitutiva del modelo de acumulación global. Esta expulsión no podría corregirse mediante mejores políticas públicas dentro del mismo marco, sino que se ha vuelto una necesidad estructural del sistema.

Las comunidades afectadas por el extractivismo minero y petrolero constituyen los territorios que deben ser despojados para alimentar las cadenas globales de producción y consumo. Su desplazamiento y la destrucción de sus formas de vida no son «daños colaterales» sino requisitos operativos de la acumulación por desposesión que caracteriza al capitalismo contemporáneo. Del mismo modo, los trabajadores informales y autónomos que proliferan en las economías periféricas representan la materialización de un proceso donde el trabajo formal, regulado y con derechos laborales se convierte en una excepción histórica, no en la norma. La economía global requiere esta masa creciente de trabajo precarizado, disponible y desprovisto de protecciones sociales para mantener las tasas de ganancia.

Esta comprensión tiene efectos profundos sobre la construcción de solidaridades políticas. Significa que los movimientos sociales deben centrar su atención precisamente en estos sectores cuya opresión es constitutiva del sistema, no accidental. Las comunidades despojadas por el extractivismo, los trabajadores informalizados, los migrantes precarizados, las comunidades indígenas y campesinas amenazadas por megaproyectos: todos ellos expresan, en sus luchas concretas, las contradicciones fundamentales que el sistema no puede resolver mediante reformas parciales.

La solidaridad política debe construirse, entonces, no a partir de la promesa ilusoria de una inclusión plena en el capitalismo global, sino desde el reconocimiento de que la emancipación de estos sectores requiere necesariamente trascender la lógica misma del sistema que los sacrifica. La tarea, en síntesis, es transitar de una crítica al neoliberalismo hacia una crítica integral al capitalismo, comprendiendo que el libre comercio no es simplemente una «política equivocada» sino una expresión orgánica de las tendencias expansivas inherentes al capital como relación social.

La pregunta que se abre entonces es: ¿puede el movimiento trascender la dicotomía libre comercio/proteccionismo? ¿Es posible desarrollar una praxis internacionalista que reconozca los límites estructurales del nacionalismo económico sin caer en la resignación ante el poder del capital global? Esta crítica más profunda no implica abandonar la lucha contra los tratados de libre comercio, sino recontextualizarla en una comprensión más profunda de las dinámicas del capitalismo contemporáneo y en un proyecto de transformación radical que abarque simultáneamente las múltiples dimensiones de la dominación capitalista.

Una perspectiva integrada abriría posibilidades para una praxis más efectiva. No basta con oponerse a acuerdos específicos; es necesario construir modelos alternativos de relaciones económicas internacionales que cuestionen la propia lógica capitalista. Esto hará posible tender puentes entre distintos niveles de análisis, conectando las críticas a las cláusulas específicas de los TLC con cuestionamientos más profundos al sistema capitalista, al tiempo que permitirá ir más allá de los debates reduccionistas entre «nacionalismo económico» versus «globalismo neoliberal», reconociendo que ambos operan dentro de la misma lógica sistémica.

La entrada El falso dilema entre proteccionismo y libre comercio se publicó primero en ATTAC España | Otro mundo es posible.

Mondo Modorro – 3×06

19 Noviembre 2025 at 20:21

🏍 Es el sexto round de la tercera temporada 🏍 Vuelven dos de los más queridos colaboradores 🏍 El Archivista Nervioso con su violenta historia sobre Liam Gallagher 🏍 El Psicolibrero en muy buena compañía hablando sobre Orwell 🏍 También vuelven los Cadáveres Bien Parecidos 🏍 ¡Mucho retorno! 🏍 Hay también novedades locales 🏍 Y […]

La entrada Mondo Modorro – 3×06 se publicó primero en Radio Topo.

La ONG que fundó Bram Moolenaar, el creador de #Vim, cesa su actividad

19 Noviembre 2025 at 11:42
Por: victorhck

Bram Moolenar fundó hace 30 años la ONG ICCF Holland, que ahora ve cómo tiene que cesar su actividad de ayuda a niños en Uganda. Pero los proyectos continúan.

Una imagen con la palabra Gracias escrita en varios idiomas en fuentes de varios tamaños y en diferentes direccines

El editor de texto Vim es un software charitywear, lo que implica que las donaciones que se hacen al proyecto van a una asociación no gubernamental (ONG) de ayuda a un colectivo.

Bram Moolenar, el creador de Vim y principal desarrollador del proyecto creó hace más de 30 años la ONG International Child Care Fund Holland (ICCF Holland), para ayudar en educación y sanidad a niños y niñas huérfanos en Uganda.

Durante 30 años Bram fue además del principal motor de la ONG, su tesorero. El dinero donado al proyecto Vim, ya sea por donaciones personales o por otros medios, era enviado a Uganda en su totalidad para la financiación de esos proyectos de ayuda para los niños y niñas.

Con la inesperada muerte de Bram Moolenaar el pasado 2023, su proyecto de Vim, ha seguido adelante, ya que personas que colaboraron con él han tomado el relevo en el desarrollo y mantenimiento del código de este gran editor de texto.

Pero la situación de la ONG ICCF Holland estaba un poco en el aire. Bram era su principal impulsor y gestor de la organización que se mantiene por el trabajo totalmente voluntario de un muy reducido grupo de personas, que desde la pérdida de Bram ha seguido trabajando y creando entre otros proyectos un par de bibliotecas en colegios para educar a los niños y niñas durante estos dos años.

Pero la situación parece que se ha vuelto insostenible y después de un debate entre la gente de la ONG y la familia de Bram, la ONG ha decidido disolverse antes de acabar el año 2025. Pero el trabajo no desaparece, si alguien quiere seguir donando para ayudar a esos niños y niñas en Uganda, puede hacerlo ahora mediante la ONG https://www.kuwasha.net/ que seguirá enviando el dinero donado para la ayuda en aquel país y en concreto en sus proyectos.

Así que si quieres seguir donando a Vim, que sepas que ahora las donaciones irán a Uganda gestionadas por otra entidad que sigue el trabajo de ayuda en aquel país con sus proyectos de educación y sanidad a niños y adolescentes.

Enlaces de interés

victorhck

Una imagen con la palabra Gracias escrita en varios idiomas en fuentes de varios tamaños y en diferentes direccines

Manifiesto contra el acuerdo comercial entre la UE y los países del MERCOSUR

18 Noviembre 2025 at 20:51
Por: Arturo

En estas semanas, la Unión Europea está allanando el terreno para firmar el acuerdo comercial con los países del Mercosur (Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay) y otro acuerdo con México. 

Esto se inscribe en la línea de las políticas neoliberales que blindan el control sobre la economía de las multinacionales y los fondos especulativos, en particular los gigantes de la agroindustria, la petroquímica y el sector automotriz. 

Pero estos acuerdos tienen importantes impactos en la vida de la gente y en los ecosistemas, por lo que las organizaciones convocantes denunciamos la política comercial de la UE y los tratados de comercio que firma con terceros países, porque agravan la emergencia climática, la pobreza, el hambre, el desempleo y las desigualdades sociales. Así ha pasado con numerosos países de Asia, África y América Latina y también en Europa.

Hoy estamos delante del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación porque rechazamos el acuerdo entre la UE y los países del MERCOSUR. Y porque el ministro Planas es uno de los dirigentes políticos que más apoya este acuerdo, representando los intereses de las grandes empresas, que han hundido al campo, y no el interés general. Con su apoyo a un comercio devastador, el Gobierno de España pone en juego el futuro de la naturaleza, las bases para producir alimentos y nuestra salud. Se trata de un enésimo ataque a la soberanía alimentaria de los países, a los derechos laborales, a la viabilidad económica del trabajo en el sector agrícola en muchas regiones y a la salud de las comunidades.

El acuerdo entre la UE y Mercosur impulsaría, por ejemplo, el comercio de pesticidas prohibidos en la UE exportados a América Latina; tóxicos que vuelven como residuos en  los alimentos importados. Esto perjudicaría a la salud de las personas que trabajan en la agricultura y de las consumidoras de ambos lados del Atlántico, a los pueblos originarios y a la biodiversidad, al tiempo que contribuye a la extinción masiva de flora y fauna.

En estos días, se celebra la Cumbre de los Pueblos en Belém, Brasil, coincidiendo con la COP30, señalando los causantes de la crisis climática como los acuerdos comerciales que incrementan los gases de efecto invernadero responsables del cambio climático. La evaluación sobre los impactos del acuerdo comercial UE-Mercosur reconoció que ​provocaría un aumento de la emisión de los gases contaminantes. La agricultura industrial y la deforestación son el motor de este incremento. Por tanto, este acuerdo comercial, es contrario a la legislación europea e internacional sobre el clima. 

Si el acuerdo es perjudicial para el planeta ¿quién se beneficia? Los gigantes de la agroindustria -como Bayer-Monsanto, BASF y otros-, el mayor productor de carne del mundo, JBS, o los comerciantes de soja y maíz, Bunge y Cargill. Estas empresas tienen estrechos vínculos con partidos de extrema derecha en sus respectivos países, así como el apoyo financiero de conocidas entidades bancarias que solo ven en el sector de la alimentación como una fuente de seguir aumentando sus beneficios. 

¿Quién sale perdiendo? La pequeña y mediana agricultura y ganadería, los pueblos indígenas y personas migrantes, las personas trabajadoras de la industria y los cuidados, la mayoría de pequeñas y medianas empresas, la economía social y solidaria y, en general, las mayorías sociales. 

Pero la reivindicación de la justicia en el comercio va más allá del sector agrícola y de la cuestión de la calidad de los alimentos: es un reto social global, tanto en lo que respecta a los aspectos socioeconómicos como a los climáticos.

Desde hace mucho tiempo nos movilizamos en las calles de muchos países por el trabajo digno y justamente remunerado, los derechos humanos, los pueblos originarios y afrodescendientes, la salud pública, el bienestar animal, el acceso a una alimentación de calidad y la protección del medio ambiente. 

Sin embargo, una y otra vez, las clases dirigentes blindan los intereses económicos y financieros que persiguen estos acuerdos comerciales.

Las campesinas y los campesinos, sindicalistas, activistas de organizaciones de solidaridad internacional y ecologistas, colectivos antirracistas, anticoloniales y en defensa de los pueblos originarios, científicas, artistas y la ciudadanía organizada, exigimos la regulación de los mercados internacionales y denunciamos las políticas del mal llamado «libre comercio» que deslocaliza las producciones agrarias, cierra el pequeño comercio y la industria de PYMES, privatiza los servicios públicos así como rebaja las normas sociales y medioambientales.

Esta acción se inscribe plenamente en la movilización social contra el genocidio en Palestina, contra los recortes en los servicios públicos, contra el negacionismo climático y en total solidaridad con las comunidades de los países del Sur global, también víctimas de los acuerdos de comercio y el despojo racista de las grandes empresas europeas y españolas.

Reivindicamos el derecho a unos ingresos dignos de las campesinas y los campesinos, la protección de la agricultura familiar y una alimentación sana y libre de agrotóxicos frente a la lógica del mercado y el dominio de las multinacionales.

Defendemos una verdadera democracia alimentaria y el apoyo a un modelo agrícola que proteja el futuro de las generaciones venideras y de nuestro planeta.

Impedir el acuerdo comercial UE-MERCOSUR abre una oportunidad para cuestionar estructuralmente este sistema económico injusto y sacar la agricultura y la alimentación de la lógica de los mercados.

Hacemos un llamamiento a todas las agricultoras y agricultores para que se rebelen contra estas políticas injustas aplicadas al sector agrícola.

Hacemos un llamamiento a todos los sindicatos para que se movilicen en defensa de una remuneración justa del trabajo, la desglobalización y la relocalización de una industria que funcione respetando los límites del planeta y con criterios de justicia social.

Hacemos un llamamiento a todas las organizaciones preocupadas por las cuestiones de solidaridad internacional, democracia, protección del medio ambiente y salud pública para que digamos claro y alto al Gobierno de España y al parlamento que NO queremos estos acuerdos de comercio que entierran cualquier atisbo de política pública de justicia social y ambiental.

Hacemos un llamamiento a toda la ciudadanía preocupada por la vivienda, el mundo rural, la educación, la sanidad, el transporte público, la cultura, la calidad de los alimentos y la salud a cuestionar el sistema económico. 

Ante los colapsos mundiales, necesitamos más cooperación en lugar de comercio de productos nocivos.

¡Por una economía social y solidaria!

¡No más acuerdos de comercio e inversiones!

¡Los ingresos justos para quienes producen nuestra alimentación, junto con los derechos humanos, los derechos laborales, la igualdad real, el bienestar animal, el clima y la biodiversidad deben primar sobre los intereses económicos!

¡Sí a la soberanía alimentaria, la justicia climática y la solidaridad internacionalista!

Attac, Amigas de la Tierra, CGT, Ecologistas en Acción, Entrepueblos, Greenpeace, Justicia Alimentaria, Sindicato Labrego Galego (SLG).

Texto leído en la acción-performance realizada en Madrid, el 18 de noviembre de 2025. 

La entrada Manifiesto contra el acuerdo comercial entre la UE y los países del MERCOSUR se publicó primero en ATTAC España | Otro mundo es posible.

Pedro Sánchez y Luis Planas reciben un baño de pesticidas en una protesta para denunciar el acuerdo comercial entre la UE y los países del MERCOSUR

18 Noviembre 2025 at 20:41
Por: Arturo

COMUNICADO DE PRENSA

18 de noviembre de 2025

 

  • El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación se convierte en el escenario de una performance donde una pirámide de barriles derrama productos tóxicos sobre líderes políticos
  • Con esta acción, Attac, Amigas de la Tierra, CGT, Ecologistas en Acción, Entrepueblos, Greenpeace, Justicia Alimentaria y Sindicato Labrego Galego denuncian que el acuerdo comercial alimentará el colapso climático, el comercio de sustancias tóxicas y la injusticia social
  • Las organizaciones convocantes coinciden en sus demandas con la Confederación General de Cooperativas Agrarias 
  • El apoyo del Gobierno español al acuerdo comercial contradice sus compromisos frente al cambio climático y los derechos humanos

Madrid (España), 18 de noviembre de 2025 – El Toxic Trade Tour, una protesta itinerante por diversas ciudades europeas contra el acuerdo comercial UE-Mercosur, ha hecho hoy escala en Madrid. Desde finales del pasado mes de octubre y hasta finales de noviembre, una coalición de organizaciones sociales y ambientales europeas coordinadas por la European Trade Justice Coalition, de la que forma parte la Coordinadora Europea de La Vía Campesina, Ecologistas en Acción o Greenpeace, están llevando a cabo esta protesta por diversos países de la UE para denunciar este acuerdo entre la Unión Europea y los países del bloque del Mercosur (Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay). 

La protesta se ha celebrado en vísperas de que el Consejo de Asuntos Exteriores de la UE, previsto para el próximo 24 de noviembre, se reúna para tomar una decisión sobre el acuerdo. La firma formal podría tener lugar el 5 de diciembre en la cumbre del Mercosur en Brasil y se espera que la votación del Parlamento Europeo se celebre poco después.

Este tratado comercial establece una relación tóxica entre la UE y los países del Mercosur, al  perpetuar un modelo de relaciones internacionales de corte extractivista y neocolonial, consolidando una forma de globalización que destruye la naturaleza, pone en riesgo la salud y amenaza la pervivencia de culturas y economías locales a ambos lados del Atlántico. Por eso reclamamos al PSOE que no apoye la firma de este acuerdo y sea coherente con sus propias promesas electorales en esta materia”, han afirmado las organizaciones convocantes. 

Dentro del Toxic Trade Tour, las organizaciones convocantes en el Estado español  —Attac, Amigas de la Tierra, Ecologistas en Acción, Entrepueblos, Greenpeace, Justicia Alimentaria— (2) han realizado una performance en Madrid frente al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para señalar el apoyo del Gobierno español a la firma de este tratado. Durante la acción,  han colocado una pirámide de barriles tóxicos ante el Ministerio, mientras que activistas con disfraces de responsables políticos (del presidente español Pedro Sánchez, la presidenta de la Comisión Europea Ursula Von der Leyen y el ministro de Agricultura español Luis Planas) han sido interpelados por el público sobre los riesgos que entraña este acuerdo comercial para el clima, la salud y la justicia social. Ante las respuestas esquivas o no creíbles de los políticos, estos han recibido una reprimenda en forma de ducha de productos tóxicos (3). Acto seguido, se ha leído un manifiesto (4) recordando la gran cantidad de colectivos de la sociedad civil y de lo sectores agrícolas afectados que se oponen a este acuerdo (5). 

La semana pasada, la Confederación General de Cooperativas Agrarias de la Unión Europea (COPA-COPEGA) rechazó la firma de este acuerdo comercial denunciado los perjuicios sobre algunas producciones de los países de la UE (maíz, azúcar, carne de vacuno) y señalando también la incoherencia que supone que la UE permita la exportación de agrotóxicos prohibidos en la UE al tiempo que quiere permitir la entrada de materias primas y productos agrícolas con presencia de esas mismas sustancias tóxicas no autorizadas.

Un acuerdo comercial que traerá más emisiones y más pesticidas peligrosos

Según las organizaciones convocantes, mientras en la COP30 en Belém se está hablando de la necesidad de una mayor ambición a la hora reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, los que negocian este acuerdo comercial caminan en la dirección contraria, incentivando un mayor flujo de productos y materias primas entre continentes, algunas de las cuales (como la soja o la carne de vacuno) están detrás de procesos de deforestación y gran cantidad de emisiones de gases de efecto invernadero. Sin una reducción inmediata y profunda de las emisiones en todos los sectores será imposible limitar el calentamiento global a 1,5 ºC y evitar los peores efectos”. 

Entre los graves problemas que lleva aparejado este acuerdo comercial, los movimientos sociales recuerdan que la Evaluación del Impacto sobre la Sostenibilidad (EIS), realizada a finales de 2020 por encargo de la Comisión Europea, calculó  ​que ​este tratado comercial provocaría un aumento global de metano y óxido nitroso, así como un aumento de las emisiones de CO2 en la UE, Brasil y Argentina y un “aumento moderado general” de las emisiones de GEI en otros países del Mercosur. 

Aunque el propio estudio señalaba que las emisiones derivadas de los cambios en el uso del suelo y la deforestación representan el 55 % de las emisiones de CO2 de Brasil y el 70 % de las de Paraguay, la consultora redactora de la evaluación admitió que estas proyecciones excluyen cualquier cálculo de las emisiones derivadas de los cambios en el uso del suelo y la deforestación. 

«La evaluación del impacto social y ambiental de este acuerdo comercial ha sido un mero trámite. La política comercial de la UE no se puede construir escondiendo debajo de la alfombra la deforestación, producida por materias primas como la soja, la caña de azúcar o la producción de carne de vacuno, amén de modernas formas de trabajo esclavo, invasión de tierras indígenas y la vulneración de los derechos humanos, han declarado las organizaciones.

Asimismo, en la declaración leída durante el acto, las entidades convocantes han recordado que una investigación de Greenpeace Alemania (5) encontró residuos de varios pesticidas en limas producidas en Brasil y vendidas dentro del mercado de la UE, a través del análisis en laboratorio de más de 50 muestras de limas compradas en supermercados y mercados mayoristas en Austria, Bélgica, Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, España y Suecia. 

Los pesticidas, entre ellos el herbicida glifosato y los insecticidas imidacloprid y cipermetrina, son fabricados en la UE y vendidos por empresas europeas en Brasil, uno de los principales países consumidores de plaguicidas del mundo. Más de la mitad de los pesticidas encontrados son considerados altamente peligrosos porque suponen un grave riesgo para la salud humana, los animales o el medio ambiente. El acuerdo UE-Mercosur propuesto eliminaría los aranceles sobre las exportaciones de plaguicidas de la UE a los países del Mercosur y reduciría el control en los alimentos importados, lo que significa que tanto el uso de pesticidas como sus efectos adversos aumentarían exponencialmente. 

Todo lo que rodea el acuerdo UE-Mercosur es tóxico. Primero, los gigantes de la industria química de la UE ya producen y exportan a Brasil sustancias tóxicas, algunas de las cuales ni siquiera están aprobadas para su uso dentro de la UE; y luego, la UE las reimporta en forma de residuos en los alimentos. Este acuerdo impulsará el comercio de pesticidas y potenciará este ciclo tóxico”, han concluído las entidades convocantes.

Notas: 

  1. European Trade Justice Coalition. https://europeantradejustice.org/toxic-trade-tour/
  2. El líquido utilizado, de color verde, es inocuo y está elaborado a base de materiales naturales y fácilmente lavable.
  3. Manifiesto: https://www.noalttip.org/manifiesto-contra-el-acuerdo-comercial-entre-la-ue-y-los-paises-del-mercosur/ 
  4. Sindicatos, consumidores, grupos de derechos humanos y organizaciones ambientalistas, economistas, pueblos indigenas, municipios locales y otras organizaciones de la sociedad civil han criticado el acuerdo. Además, más de 2 millones de ciudadanos de la UE que han firmado peticiones en contra. 

El informe “A toxic Cocktail: the EU-Mercosur Deal. Limes reveal how european pesticides travel around the world (and back), traducido al castellano por Ecologistas en Acción, está disponible en: https://www.ecologistasenaccion.org/289636/

La entrada Pedro Sánchez y Luis Planas reciben un baño de pesticidas en una protesta para denunciar el acuerdo comercial entre la UE y los países del MERCOSUR se publicó primero en ATTAC España | Otro mundo es posible.

A TAPAR LA CALLE 13/11/25 GRUPO DE PEQUES

17 Noviembre 2025 at 18:02

Bienvenides al programa de radio de les niñes de la Gusantina “A TAPAR LA CALLE”. Un espacio que invita a jugar, participar, ocupar, opinar, reír, soñar, trastear, divertirnos… Un espacio donde pequeñes y adultes afinamos nuestra oreja verde. ¡Ya estamos aquí con el último programa de A tapar la calle recién subido a la web! […]

La entrada A TAPAR LA CALLE 13/11/25 GRUPO DE PEQUES se publicó primero en Radio Topo.

¿Trump nos ha dejado sin política? Por qué centrar la pelea en los tratados

7 Noviembre 2025 at 08:00
Por: Nuria

Artículo original publicado en juantorreslopez.com por Luciana Ghiotto

Apostaría a que la mayoría de las personas que lean este artículo no han oído hablar nunca de las «monedas estables» (stablecoins, en inglés), a pesar de que son una de las innovaciones financieras más importantes de los últimos tiempos y, sobre todo, a pesar de que su uso mal regulado entraña un gran peligro, como voy a tratar de explicar a continuación de la forma más clara y resumida posible.

¿Qué es una moneda estable?

Una moneda estable es un tipo de criptomoneda con una característica singular.

Como criptomoneda, una moneda estable es lo que hoy día se llama un token, es decir, algo sin soporte físico que representa un valor, como una ficha (token, en inglés) o un código. Su existencia se basa en algo inmaterial como un algoritmo (un conjunto de tareas u operaciones definidas para plantear o resolver algún problema) o una «cadena de bloques» (blockchain, en inglés) que es un gran conjunto de datos (una especie de gran libro de contabilidad digital) organizados en bloques entrelazados con operaciones complejas que le proporcionan seguridad.

Como todas las demás criptomonedas, las monedas estables son un activo (cualquier cosa en poder de alguien y que puede proporcionar rendimiento) de naturaleza digital, cuyo propietario tiene la clave para poder desbloquearlo y realizar así transacciones por un precio equivalente al que tenga en ese momento.

La característica singular de las monedas estables es que su precio no va a variar (de ahí su nombre). Eso es posible porque, a diferencia de lo que sucede con las demás criptomonedas -que depende de la oferta y demanda que de ellas haya en el mercado-, las monedas estables fijan su precio en relación con algún otro activo (una moneda oficial u otra criptomoneda) y lo mantienen siempre constante.

Para que eso sea posible, quien las emite (en principio, cualquier sujeto) crea al mismo tiempo herramientas de estabilización. Su funcionamiento es complejo y no lo voy a explicar aquí. Baste saber que pueden ser los llamados «activos de reserva» que se pueden ir canjeando en cualquier momento para asegurar que la moneda estable mantiene su valor, o bien algoritmos que automáticamente llevan a cabo operaciones de compra y venta para estabilizarlo.

Crecimiento vertiginoso

Aunque empezaron como algo anecdótico y de poco alcance, la expansión de estas monedas estables es hoy día extraordinaria. Según los datos que proporciona la plataforma Allium Labs, el valor total de las que están en circulación a primeros de octubre de 2025 era de 260.000 millones de dólares (según coingecko, 312.000 millones), 65 veces más que hace tan sólo 5 años. En los últimos doce meses se habrían utilizado para realizar 9.600 millones de transacciones por un valor total de 46,8 billones de dólares. De ser así (otras estimaciones dan valores más bajos) significa que casi triplican el valor de las realizadas con tarjetas Visa.

¿Para qué usar monedas estables?

Cuando se conoce la extraordinaria expansión de las monedas estables es inevitable que surja una pregunta: ¿qué sentido o interés tiene utilizarlas si están referenciadas en dólares o en cualquier otra moneda por un valor que no va a cambiar? Es decir, ¿no es lo mismo que usar estas monedas?

Podría decirse que se usan porque hoy día pueden ser más rápidas y menos costosas que las transacciones realizadas, por ejemplo, con tarjetas de crédito o débito. Aunque eso quizá no sea del todo exacto y sea una ventaja que seguramente desaparecería si estas últimas tuvieran que competir con las monedas estables, porque el retraso y las comisiones que cobran sólamente son el resultado de su poder de mercado y no de razones tecnológicas insuperables. 

También se podría justificar su uso por la estabilidad, pero en su breve historia ya se ha podido comprobar que las monedas estables no son tan estables como dice su nombre. Ha habido un buen número de casos de desvinculación del dólar o de imposibilidad de liquidar. Sencillamente porque, como diré enseguida, carecen de garantía o de una institución que las respalde.

Igualmente, podría argumentarse que se utilizan pero básicamente en operaciones específicas y no en las transacciones comerciales más habituales. De hecho, su uso principal (90 %) es la compra y venta de criptomonedas y la realización de operaciones en las llamadas finanzas descentralizadas, es decir, las que se mueven al margen de la banca y la bolsa tradicionales. Pero la opinión generalizada es que su próxima e inmediata batalla será la de superar las dificultades que su utilización supone hoy día para el comercio generalizado y expandirse también entre las transacciones más convencionales.

Algunos economistas, como Paul Krugman, creen que esto último no tiene sentido: «No hay nada que se pueda hacer con ellas que no se pueda hacer de forma más económica y sencilla con tarjetas de débito, transferencias bancarias, etc. Es decir, ¿por qué no usar dólares en lugar de tokens que supuestamente están respaldados por dólares?».

El verdadero interés de las monedas estables

A pesar de las desventajas y limitaciones que acabo de señalar, la pregunta de Krugman tiene respuestas. Sí que hay razones por las que está interesando impulsar el crecimiento de las monedas estables, aunque no son las que habitualmente se están dando por quienes las defienden.

Por supuesto y en primer lugar, la que el propio Krugman señala: con las monedas estables se pueden hacer operaciones sin dejar rastro, puesto que su uso es completamente anónimo. Según un informe de Chainanalysis, el 60 % de las transacciones ilegales de criptomonedas (estafas, evasión fiscal y de controles de capital o blanqueo) y en el 80 % de todas las transacciones de criptomonedas por regímenes sancionados y grupos terroristas llevadas a cabo en 2023 se realizaron con monedas estables.

En segundo lugar, las monedas estables van a seguir expandiéndose porque lo desean las grandes corporaciones que dominan el mundo e imponen la agenda de los gobiernos porque serán ellas las que hagan un gran negocio creándolas a su antojo. Cuando las emitan, cuando creen sus propios medios de pago, podrán desentenderse (al menos, en muy gran medida) de las restricciones monetarias que establecen los bancos centrales o los gobiernos, crear sus propios medios de pago, y convertirse en auténticas entidades financieras, dando créditos y financiando a otros o a sí mismas, libremente y con rentabilidad. Además de tener una gran cantidad de datos e información personal de quienes las utilicen.

En tercer lugar, también están interesados en la utilización de las monedas estables quienes realizan remesas transfronteras de cierto valor (un 6 % del total de su uso) y gobiernos y empresas de países con alta inflación, divisas frágiles o inestables, y sistemas bancarios poco fiables. Aunque es cierto que otros, sin embargo, las rechazan precisamente por los motivos que señalo a continuación.

En cuarto lugar, no se puede olvidar que, hoy día, el 97,4% por las monedas estables está referenciado en dólares. Eso quiere decir que, en la práctica totalidad de los casos, disponer de monedas estables equivale a ser titular de un depósito en esa moneda; usar monedas estables vinculadas al dólar sería lo mismo, en realidad, que utilizar dólares.

Por tanto, es Estados Unidos quien está claramente interesado en que se incremente lo más posible la circulación de monedas estables, emitidas como he dicho por todo tipo de grandes empresas, porque eso es lo mismo que incrementar el uso del dólar cuando este, como ya es bien sabido, está siendo mucho menos deseado o incluso rechazado por muchos países. Fue el propio presidente Donald Trump quien reconoció expresamente en su orden ejecutiva de 23 de enero de 2025 que era política de su Administración «promover y proteger la soberanía del dólar de los Estados Unidos, incluso mediante acciones para promover el desarrollo y el crecimiento de monedas estables respaldadas por dólares legales y legítimas en todo el mundo».

Y con ese fin, Trump firmó el pasado18 de julio la llamada ley Genius (Ley de Orientación y Establecimiento de Innovación Nacional para Stablecoins de Estados Unidos) que había sido aprobada en el Senado y la Cámara de Representantes, no sólo con el voto republicano sino también con el de un buen número de legisladores demócratas.

Y es precisamente esta ley la que ha abierto la espita para que las monedas estables (como vía que Estados Unidos quiere utilizar para evitar su declive como potencia monetaria imperial) se conviertan en una bomba financiera de relojería. Entre otras, por las siguiente razones:

– La ley permite que las empresas emisoras de monedas de estables se conviertan en depositantes de fondos y de reservas que no van a estar asegurados de ninguna forma, a diferencia de lo que ocurre con los bancarios que lo están hasta 250.000 dólares, en Estados Unidos.

– El régimen regulatorio que establece para las monedas estables creadas por las grandes empresas es muy débil y no contempla los riesgos que conlleva lo anterior, ni medidas suficientes para evitarlos y hacerles frente.

– En lugar de impedirlo, la ley da amplios poderes a las autoridades para permitir que las empresas emisoras vendan derivados de las monedas estables y todo tipo de productos especulativos, difundiendo el riesgo por todo el sistema financiero.

– No se crea ningún fondo de seguro, ni prestamista de última instancia que pueda garantizar el reembolso si las monedas estables se encuentran con problemas. En realidad, más bien incentiva las quiebras, de modo que al menor problema los emisores se retirarán del mercado.

– No se establecen garantías para que la emisión de monedas estables se sostenga en tecnologías que permitan pagos rápidos, confiables, subsanables en caso de error, y capaces de operar con transacciones de gran volumen al mismo tiempo.

– Aunque la ley establece que los emisores de monedas estables no pueden proporcionar rendimiento a quienes las posean, lo cierto es que esa posibilidad no está claramente prohibida, y de hecho hay plataformas que lo proporcionan. Eso podría ser un mecanismo adicional de drenaje de fondos desde la banca tradicional que puede debilitarla extraordinariamente. A lo cual hay. que añadir que los emisores podrían utilizar la liquidez obtenida para depositarla en los bancos por cantidades superiores a las que están aseguradas, lo que igualmente agranda la vulnerabilidad del sistema financiero.

– Finalmente, la ley no contempla los riesgos que conlleva la gran concentración que se produce hoy día en el sector y la que igualmente habría incluso cuando las grandes empresas comiencen a emitirlas. Si en algún momento hubiera que rescatar a los emisores, lo que antes o después ocurrirá en las condiciones que acabo de señalar, sería extraordinariamente costoso hacerlo, pero no habrá manera de evitar rescatarlos porque se dirá, como en 2008 con los bancos, que son demasiados grandes para dejarlos caer.

Una irresponsabilidad que, eso sí, hace aún más ricos a los multimillonarios, empezando por Donald Trump

El impulso a las monedas estables con la regulación que está estableciendo Estados Unidos comporta un riesgo financiero muy grande y sistémico, porque cualquier crisis se extendería al conjunto de la economía. Su enorme expansión se asume sólo para tratar de evitar el inevitable declive del dólar por un procedimiento que, mientras tanto, dará enormes beneficios a las grandes corporaciones y a los ya multimillonarios.

Donald Trump, quien hasta poco se había mostrado muy enemigo de las criptomonedas, ha sido inteligente asumiendo que son un instrumento adecuado para aliviar el declive del dólar como moneda imperial. Lo ha aprovechado para convertir el apoyo legal que le presta su Administración en un gran negocio personal y familiar, creando algunas y especulando con información privilegiada. Según Forbes, su fortuna en criptomonedas ya supera todas las propiedades de su cartera inmobiliaria y puede haber ganado unos 1.000 millones de dólares en los últimos nueves meses. 

No está solo. Según Henley & Partners y New World Wealth, en todo el mundo hay 450 personas con activos en criptomonedas por valor de más de 100 millones de dólares y 36 con más de 1.000 millones. Añadan a eso y háganse una idea de lo que ganarán, a las grandes empresas cuando comiencen a emitir en masa monedas estables.

Es para ellos para quien se pone en marcha un negocio colosal. Tan colosal como la crisis que traerá consigo cuando caiga sobre su base, construida sobre humo y especulación constantes, y que volverá a pagar el resto de la población. Salvo que la gente no se deje atontar, despierte, se entere de estas cosas, las difunda y se movilice para evitarlas.

La entrada ¿Trump nos ha dejado sin política? Por qué centrar la pelea en los tratados se publicó primero en ATTAC España | Otro mundo es posible.

Recopilación del boletín de noticias de la Free Software Foundation – noviembre de 2025

4 Noviembre 2025 at 10:55
Por: victorhck

Recopilación y traducción del boletín mensual de noticias relacionadas con el software libre publicado por la Free Software Foundation.

¡El boletín de noticias de la FSF está aquí!

La Free Software Foundation (FSF) es una organización creada en Octubre de 1985 por Richard Stallman y otros entusiastas del software libre con el propósito de difundir esta filosofía, frente a las restricciones y abusos a los usuarios por parte del software privativo.

Por cierto este mes se cumplen 40 años de la creación de la FSF.

La Fundación para el software libre (FSF) se dedica a eliminar las restricciones sobre la copia, redistribución, entendimiento, y modificación de programas de computadoras. Con este objeto, promociona el desarrollo y uso del software libre en todas las áreas de la computación, pero muy particularmente, ayudando a desarrollar el sistema operativo GNU.

Mensualmente publican un boletín (supporter) con noticias relacionadas con el software libre, sus campañas, o eventos. Una forma de difundir los proyectos, para que la gente conozca los hechos, se haga su propia opinión, y tomen partido si creen que la reivindicación es justa!!

Puedes ver todos los números publicados en este enlace: http://www.fsf.org/free-software-supporter/free-software-supporter

¿Te gustaría aportar tu ayuda en la traducción y colaborar con la FSF? Lee el siguiente enlace:

Por aquí te traigo un extracto de algunas de las noticias que ha destacado la FSF este mes de noviembre de 2025.

La FSF anuncia el proyecto Librephone

Del 14 de octubre

La FSF está abordando la libertad en la telefonía móvil con su nuevo proyecto, Librephone. Este proyecto no construirá un sistema operativo móvil desde cero. Se trata de un proyecto a largo plazo para comprender mejor y aplicar ingeniería inversa al código no libre utilizado por prácticamente todos los SoC actuales, además de sentar las bases para un futuro de libertad en la telefonía móvil.

Puedes mantenerte informado uniéndote al canal en el servidor IRC Libera.Chat. Toda la información sobre Librephone se publicará en su página web, ¡así que no olvides añadirla a tus marcadores!

La FSF cumple 40 años con un nuevo proyecto revolucionario y un nuevo presidente

Del 4 de octubre

El aniversario de la FSF comenzó con una conversación entre los miembros de la junta directiva Christina Haralanova, Gerald J. Sussman, Ian Kelling y Richard M. Stallman, quienes hablaron sobre la misión de la organización y su visión de futuro.

Durante esta conversación, se presentó a Ian Kelling como el nuevo presidente de la FSF. El anuncio de la presidencia de Kelling no fue el único cambio importante que se compartió en FSF40: la directora ejecutiva de la FSF, Zoë Kooyman, presentó el proyecto más reciente de la organización: Librephone. Puedes leer más sobre el evento del 40.º aniversario de la FSF en el siguiente artículo.

El ocaso de Windows 10 no significa el fin de tu PC

Del 9 de octubre

Para quienes tengan ordenadores con Windows 10, es posible que hayan experimentado diversos problemas al intentar la actualización forzada a Windows 11 (siempre que su hardware fuera compatible). Esta no es la primera vez que Microsoft intenta controlar a los usuarios, ni será la última.

El fin del soporte para Windows 10 es la oportunidad perfecta para frenar este ciclo y pasarse a un sistema operativo GNU/Linux que respete la libertad. Existen varias distribuciones GNU/Linux libres y aprobadas por la FSF a las que pueden cambiarse, muchas de ellas con útiles tutoriales en línea. Prueben alguna si aún no usan un sistema operativo libre; siempre tendrán la libertad de volver a un sistema operativo que intente limitar sus funciones.

apoyo_fsf

Estas son solo algunas de las noticias recogidas este mes, ¡¡pero hay muchas más muy interesantes!! si quieres leerlas todas (cuando estén traducidas) visita este enlace:

Y todos los números del «supporter» o boletín de noticias de 2025 en español, francés, portugués e inglés aquí:

Support freedom

victorhck

apoyo_fsf

Kodi 21.3 ya disponible con mejoras en Blu-Ray y HDR

2 Noviembre 2025 at 10:34
Por: Pablinux

Kodi 21.3

Nuestro software favorito para reproducir todo tipo de contenido multimedia ya está bastante maduro. En series pasadas hemos visto creo recordar que hasta 7 u 8 actualizaciones de mantenimiento, pero aquí estamos, a las puertas de Kodi 22 Piers y se acaba de lanzar Kodi 21.3. La noticia aún no aparece en el blog oficial, pero sí en su GitHub, en donde además de las novedades podemos descargar el código fuente. Vaya por delante que en el momento de escribir este artículo no hay instalables ni siquiera para Windows, pero los subirán pronto.

Si estás esperando nuevas funciones destacadas, sigue esperando. Esas llegarán en Kodi 22, actualmente en Alfa, y de momento no parece que vayan a ser muy llamativas. Como decíamos, el software ya está muy maduro, aunque a mí no me importaría que actualizaran la skin oficial. Lo que sigue es la lista con las novedades de Kodi 21.3.

Novedades de Kodi 21.3

La nueva actualización llega cargada de mejoras y arreglos que se notan tanto en la experiencia visual como en el rendimiento general. En la parte de vídeo, ahora se ha añadido soporte HDR en Xbox One, algo que muchos venían pidiendo, además de corregirse varios fallos en la reproducción de Blu-rays en Linux, incluyendo los molestos errores de audio y subtítulos al reanudar la reproducción. También se ha mejorado el manejo de los metadatos HDR10, para una representación de luz más precisa, y se ha ajustado la selección de subtítulos para que funcione correctamente con los códigos de idioma de dos letras (ISO 639-1).

En lo que respecta a la biblioteca de vídeo y su gestión, el proceso de actualización es ahora más rápido y eficiente. Se ha solucionado el problema que hacía que los archivos con varios episodios sobrescribieran el primero, y también se han corregido errores en los diálogos de información de ciertas versiones alternativas de películas, eliminando algunos falsos positivos en la detección.

Apartado musical

El apartado musical también recibe atención: las búsquedas en CDDB ahora funcionan correctamente gracias a la integración con la API de Gnudb.org, y ya no fallan las búsquedas de álbumes por nombre de artista, algo que afectaba a bastantes usuarios.

En audio, se ha corregido un fallo poco común que podía provocar un crash en Pipewire al conectar o desconectar dispositivos. Por su parte, el sistema PVR (para ver o grabar televisión en directo) ya no se cierra inesperadamente cuando se detiene un flujo desde una app remota.

Otras mejoras

Entre las mejoras de periféricos, ahora se incluye soporte para teclados turcos en Linux, se han corregido los problemas al activar o desactivar los adaptadores Pulse-Eight CEC, y se han ajustado las teclas Delete e Insert alternativa en macOS. También se han pulido pequeños defectos visuales al gestionar dispositivos externos.

El sistema de add-ons recibe una curiosa corrección: se ha solucionado un bug que impedía actualizar los complementos tras 25 días de inactividad, ampliando ese límite a unos… 68 años (sí, literalmente).

En la parte visual, se han corregido cierres inesperados al abrir varios diálogos al mismo tiempo, se ha ajustado la ventana de suspensión que a veces quedaba abierta al reactivar el sistema, y se ha mejorado el soporte táctil en los controles deslizantes.

Por último, el apartado de red también mejora: se añade soporte para autenticación HTTP básica, se corrigen algunos fallos en transmisiones interrumpidas por HTTP/2, y se actualizan las librerías de red, incluyendo libnfs a la versión 6 y los certificados CA de Mozilla al paquete más reciente (15 de julio de 2025).

Kodi 21.3 llegará pronto a Flathub, más tarde en repositorios oficiales

Para los usuarios de Linux, la build o versión oficial es la que hay en Flathub, que pronto se actualizará a la versión 21.3. Más tarde actualizarán los paquetes de los repositorios oficiales de las diferentes distribuciones Linux. También hay disponible un paquete snap y una AppImage, ambos empaquetados con todo el software necesario, pero no son oficiales y no están soportadas por Kodi Team.

Los documentos Halloween de Microsoft

31 Octubre 2025 at 11:42
Por: victorhck

Allá por el año 1998, se filtraron una serie de documentos confidenciales internos de Microsoft donde se documentaban sus estrategias para hacer frente al software de «código abierto» en general y GNU/Linux en particular

Imagen terrorífica de una silueta oscura iluminada por una luz azul mortecina detrás de un cristal. La criatura apoya sus manos sobre ese cristal que nos separa del horror...
Imagen: Oskar Smethurst

Desde hace un tiempo grandes empresas tecnológicas se han vuelto «adoradoras» del software de código abierto u «open source». Una versión descafeinada y menos «radical» que software libre, para que a sus accionistas no piensen que aquello es un nido de wokes radicales.

Microsoft, la gran empresa de Bill Gates que desarrolló el sistema operativo más conocido: Windows, es una de esas empresas que se decanta por esas bondades del open source que tan bien sientan en las descripciones de sus productos.

Pero no siempre ha sido así (realmente ahora es así o es un «green washing» tecnológico). Hubo un tiempo en el que Microsoft tenía estrategias contra software que amenazaba su hegemonía y que se estaba desarrollando bajo eso tan alejado de sus políticas empresariales como era el código abierto y el software libre.

Y así se inicia esta «pesadilla» de Halloween… 🎃

Esas estrategias se suponía que tenían que ser confidenciales e internas. Una serie de pautas a seguir para hacer calar en el ideario colectivo que eso del código abierto, eso del software libre, eso de GNU/Linux era una moda pasajera, y que contenía peligros que desconocíamos, pero que desde Microsoft nos relataban.

Pero hete aquí que esos documentos secretos, que relataban la versión interna de desprestigio de esas tecnologías diametralmente opuestas al software privativo y restrictivo de Microsoft se filtraron y vieron la luz.

El exponer sus estrategias internas para tratar de acabar con el código abierto y GNU/Linux, además de revelar sus prácticas nada respetuosas, revelaba que aunque trataban de minimizar su impacto, lo que veían o a lo que tenían miedo era al potencial que aquello pudiera tener y que el número de frikis que «militaba» en alguno de esos proyectos de software libre y GNU/Linux creciera. Y lo que es peor que muchas empresas adoptaran ese nuevo modelo, haciendo así peligrar su estatus.

Ilustración donde sobre un fondo en degradado entre verde y azul se puede leer Microsoft "love" Open Source. Y aparece el "love" tachado

El número de personas, proyectos y empresas que han adoptado el código abierto y/o GNU/Linux efectivamente creció de manera muy superior a lo imaginado. Hoy el 100% de los grandes supercomputadores utilizan GNU/Linux o variantes. Los servidores que hacen que funcione Internet corren GNU/Linux y software de código abierto o software libre (o una mezcla de ambos)

Pero apesar de esas cifras enormes y crecientes, Microsoft no vio peligrar su hegemonía y sigue reinando en muchos campos de la tecnología. Eso sí, ha mudado su discurso de una actitud en contra de ese código abierto a posiciones a favor (o ese es el márqueting que quieren vender)

Pero volvamos a esos documentos Halloween que evidenciaron su lucha contra la amenaza del software de código abierto. Esos documentos son reales, y son auténticos, así lo ha reconocido Microsoft. Se dieron a conocer porque llegaron a manos de Eric S. Raymond (personaje controvertido por el cual no siento mucha simpatía).

Llegaron a sus manos un 30 de octubre de 1998 y los publicó en su web con anotaciones propias un 1 de noviembre de 1998. Por coincidir con fechas de celebración de la festividad de Halloween recibieron ese nombre.

Microsoft veía en ese movimiento del código abierto y software libre, en el que también englobamos a GNU/Linux, como una amenaza y expone que una de sus estrategias sería aplicar Embrace, Extend and Extinguish en español adoptar, extender, y extinguir para tratar que Microsoft siguiera siendo la pieza fundamental de esos nuevos tiempos y seguir siendo quien marcara los pasos a seguir.

Frente a esa nueva competencia también había intentado la estrategia FUD frente a sus competidores. FUD sería Fear, Uncertainly and Doubt traducido como Miedo, Incertidumbre y Duda. Es decir frente a un competidor, hacer creer desde tu postura dominante y con capacidades casi infinitas que los competidores representan una amenaza, en quien no se puede confiar. Algo así como el miente que algo queda de Goebbles que siguen practicando la extrema derecha en el terreno político en pleno siglo XXI… pero me desvío del tema.

Eric S. Raymond publicó esos documentos con sus propias anotaciones y además de los propios documentos de Microsoft, se han complementado con otros documentos relacionados.

¿Y todo esto a qué viene?

La cosa es que echando un vistazo por la red, me pareció muy pobre, que los documentos siguieran en la web de Eric S. Raymond y que esta estuviera en un dominio sin la «s» en su http. Ese siempre me parece un paso previo a la desaparición del dominio por completo.

Cierto que hay una versión archivada en archive.org, que es desde la que he cogido los textos de los documentos, porque referencian en los enlaces a páginas también archivadas en archive.org que en muchos casos las originales ya no existen.

Con los textos de los documentos descargados he querido subirlos a un repositorio Git, para seguir dándoles visibilidad y difusión en internet y seguir haciendo que estén disponibles, si otras fuentes fallasen.

He traducido algunas partes, no de los propios documentos originales, si no de la introducción que de ellos hace Eric S. Raymond y de algunas aclaraciones respuestas a preguntas más frecuentes (FAQ) que le hicieron al respecto.

Los documentos que descargué están en un repositorio de git en GitLab y he construido una pequeña página html con ellos. Tienes la web disponible en este enlace:

No espero que los leas todos (yo no lo he hecho) pero sí que les eches un vistazo o que leas las acotaciones de Eric S. Raymond o los anexos a los documentos originales.

Recordemos que Microsoft viene de estos pensamientos, que sí, que muchos ejecutivos han cambiado y los tiempos con ellos, peeeeeero siempre me causa cierto reparo admitir que todo aquello cambió y ahora el rumbo es diametralmente opuesto. Como dijo alguna vez uno de los protagonistas sin quererlo de esos documentos Halloween, Linus Torvalds: «Hablar es fácil, enséñame el código».

Es decir, Microsoft puede comprar el mayor repositorio de código abierto y software libre que existe, como es GitHub, y muchas otras acciones, pero sigue siendo una empresa de estándares cerrados y de código privativo. Desarrolla productos abusivos con sus usuarios y les fuerza a admitir condiciones nada respetuosas… Por eso siempre tengo ese resquemor de que si lo hicieron una vez, quizás lo sigan haciendo.

En fin, aquí tienes los enlaces a los documentos originales, a los de archive.org, a mi web, etc. Lee y saca tus propias conclusiones al respecto.

Happy Halloween 🎃 !!

Enlaces de interés

Fotografía de un joven y sonriente Richard Stallman con pelo largo y barba en medio de una carretera sujetando un cartel que pone: With free software you have freedom

victorhck

Imagen terrorífica de una silueta oscura iluminada por una luz azul mortecina detrás de un cristal. La criatura apoya sus manos sobre ese cristal que nos separa del horror...

Ilustración donde sobre un fondo en degradado entre verde y azul se puede leer Microsoft "love" Open Source. Y aparece el "love" tachado

Fotografía de un joven y sonriente Richard Stallman con pelo largo y barba en medio de una carretera sujetando un cartel que pone: With free software you have freedom

Las pesadillas del software privativo

30 Octubre 2025 at 16:46
Por: victorhck

Las historias más escalofriantes del software privativo acechan en cada época del año. Ese acoso constante es el que las hace todavía más aterradoras

Imagen: Oskar Smethurst

Aunque las monstruosidades escalofriantes de la larga y oscura noche de Walpurgis sean en su mayoría imaginarias, las siniestras amenazas de los proveedores de software privativo depredador siguen siendo demasiado reales.

¡Pero no temáis! La comunidad KDE, se encargarán de ahuyentar a esos seres malignos y proteger a nuestros amigos, familiares, empresa y comunidad de todas las aplicaciones y servicios privativos inquietantes e insidiosos que acechan nuestras computadoras, teléfonos y electrodomésticos.

¡Pero no pueden hacerlo solos! Necesitamos tu ayuda para librar esta batalla contra los fantasmas tecnológicos. Realiza un donativo de cualquier cantidad a su campaña de recaudación de fondos y ayudemosles a mantener a raya a las fuerzas oscuras.

Mientras tanto, disfrutemos (o suframos) con un par de nuevas historias que nos provocarán ansiedad y reflexionen sobre las lecciones que nos enseñan. Aprendamos de ellas, porque para los protagonistas, ya era demasiado tarde…

La noche de las camas vivientes

Una epidemia de tortícolis, lumbalgia y dolor de hombros fue la primera señal de que algo andaba muy mal.

Luego, Charles, nuestro querido vecino de 80 años, postrado en cama, murió doblado por la mitad «¡Como un taco!», lamentó desconsolada su viuda. Nadie podía comprender cómo su cuerpo artrítico había logrado adoptar semejante forma.

Cuando la pareja de tres casas más abajo murió asfixiada mientras dormía, la historia dio un giro aún más extraño. Las empleadas de la limpieza los encontraron con tela acolchada y espuma viscoelástica introducidas en sus gargantas.

🎃 Haz clic para revelar la dramática historia detrás de estos espeluznantes sucesos 🎃

Es la segunda semana y ya no nos atrevemos a subir. Oímos cómo «ellos» hacen ruido arriba, intentando salir. Por ahora estamos a salvo en la planta baja, ya que todavía no dominan los pomos de las puertas ni las escaleras.

Salir de casa para escapar no es una opción. Observamos horrorizados desde la ventana de la cocina cómo un pobre incauto lo intentaba. Corrió hacia su coche, pero una enorme cama California King, sorprendentemente ágil para su tamaño, lo alcanzó. La gigantesca losa grisácea le cayó encima, aplastándolo como a un insecto.

Otros aparatos se están sumando. La última vez que probamos el filtro de agua inteligente, nos dio una mezcla tan asquerosa que nos hemos visto obligados a beber directamente del grifo.

¡Qué horror!

No podemos confiar en nada electrónico. La televisión nos mantiene confundidos con noticias falsas: ¿algo sobre la demolición de la Casa Blanca? Obviamente, se trata de IA; así que no tenemos ni idea de si es un fenómeno global o si solo afecta al microverso de nuestra tranquila calle sin salida en las afueras.

Estoy escribiendo estas memorias en la encimera de la cocina con un cuchillo, ya que el iPad ya estaba conspirando contra la humanidad incluso antes de que lo sacáramos de la caja. En resumen, si alguien lee esto, espero que sirva de advertencia a las futuras generaciones, menos ingenuas.

Sea quien sea, escuche atentamente mi advertencia: ¡Por nada del mundo se le ocurra comprar una cama conectada a la nube de AWS!


El software de KDE funciona de manera local en tu equipo, directamente en tu ordenador, sin conectarse a ningún servicio en línea a menos que tú lo decidas. No tendrás que crear una cuenta para usar Krita; KDE Connect conecta todos tus dispositivos ÚNICAMENTE en tu red local doméstica o de trabajo, sin conectarse nunca a Internet; Kdenlive solo descargará recursos cuando se lo pidas explícitamente. Con KDE, todo tu software está bajo tu control absoluto y no recibirá órdenes de servidores en línea.

Al donar a KDE, garantizas que esa comunidad de software libre pueda seguir ofreciéndote aplicaciones y entornos que te permiten mantener el control, proteger tu privacidad y evitar que te causen problemas mientras duermes.

El color de los residuos

Caminando por el denso bosque, uno llega al Páramo Estéril de forma gradual. Rodeado de helechos, bajo la sombra de árboles de veinte metros de altura, apenas se percata de que, a partir de cierto punto, la maleza comienza a volverse más escasa.

Pero si uno se adentra lo suficiente en el páramo, lo nota. Pronto, no hay vegetación alguna bajo los pies. Los pocos árboles, con hojas amarillas y escasas, yacen a ras del suelo, con los troncos retorcidos y debilitados por la putrefacción.

🎃 Haz clic para revelar la dramática historia detrás de estos espeluznantes sucesos 🎃

Llegué a una aldea. El sendero que seguía se convirtió en un camino fangoso entre chozas destartaladas. Vi a poca gente, pero también estaban demacrados y arrugados, la mayoría solo podía caminar con dos bastones.

Me miraron con recelo y no respondieron a mi saludo. Seguí adelante apresuradamente, llegando pronto al límite norte del páramo.

La vegetación volvía a espesarse cuando divisé una cabaña y a un anciano fumando en pipa en el umbral.

—¿Vienes de la ciudad? —preguntó.

—Sí —respondí—. Es un lugar precioso.

—El sol te debe haber afectado los ojos si piensas eso —rió—. Ven, tómate algo y deja que se te pase el enfado.

Cansado de caminar, la idea de probar un poco de aguardiente casero se volvió más tentadora.

Le pregunté qué había llevado a la zona a un estado tan desolador.

—¿Ves? Cayó un meteorito en la propiedad del viejo Whateley, allá —dijo señalando vagamente hacia donde yo había venido.

Me contó cómo algo se había filtrado en la tierra, envenenando el agua del pozo y luego los cuerpos y las mentes de los habitantes de la granja.

La esposa había sido internada en un psiquiátrico; el hijo andaba suelto, desnudo, por el bosque. Al viejo Whateley lo encontraron vagando por la casa vacía, balbuceando en una lengua extranjera. Como el veneno también le oscureció la piel, la policía lo confundió con un mexicano y lo envió a El Salvador.

—Está creciendo, esa cosa que dejó el meteorito, ¿ves? Se come los árboles, los insectos y las bestias.

Se estremeció.

—¡¿En serio?! —exclamé sin aliento.

—¡Qué va, hombre! Ustedes, los de la ciudad, se creen cualquier chorrada. Hay un vertedero de basura electrónica río arriba. Hace unos años, cuando Windows 11 dejó de funcionar en los ordenadores, tiraron allí cincuenta mil ordenadores viejos. Los arrasaron con excavadoras y todo para que nadie pudiera llevárselos a casa. Cadmio, ¿ves? Esa porquería está en el río, en el aire, por todas partes, y bueno… —Señaló el páramo y se encogió de hombros.

—Aun así —dijo, mientras me rellenaba el vaso—, podría haber sido peor.

—¿Por qué?

—En el pueblo de al lado van a montar un centro de datos de Meta AI —se rió entre dientes—. Estamos jodidos durante una generación, pero esos cabrones están jodidos para siempre.

Me abstuve de decirle que Windows 13 saldría ese mismo año.


KDE combate la contaminación tecnológica con su proyecto KDE Eco. No solo reducen la huella de carbono del software, sino que también se aseguran de que todo su software funcione en ordenadores de baja potencia y supuestamente obsoletos.

Si te han hecho creer que necesitas un dispositivo nuevo porque una actualización de algún software privativo indeseable impedirá que funcione en el tuyo, piénsalo dos veces. Consulta la campaña End of 10 y descubre cómo tú también puedes combatir la obsolescencia programada.

Dona a KDE y ayuda a una comunidad global a seguir luchando por el medio ambiente… ¡y por tu bolsillo!


Estas historias «teatralizadas» sirven como ejemplos reales de cómo el software privativo (aquel que te restringe tu libertad como usuario de utilizarlo como prefieras) es no solo una cortapisa tecnológica, si no también una manera de hacerte dependiente de sus decisiones comerciales.

Con el software libre, tienes libertad. Y la comunidad de KDE crea un montón de software libre para darte la libertad que mereces. Empezar a utilizar KDE es descubrir un mundo nuevo de aplicaciones útiles y variadas que hacen que puedas utilizar tus equipos con libertad.

Pero para realizar toda esa labor, la comunidad de KDE necesita dinero para sufragar todos los gastos. El software que realizan es libre y gratuito, pero requiere un montón de infraestructura y manos de obra que no lo son.

La meta de donaciones era de 50K, y en dos semans ya ha sido sobrepasada y se acerca al ambiciosa meta de 75K.

¿Ya has donado a la comunidad que crea tu entorno de escritorio favorito? No lo pienses más y colabora con la cantidad que desees, y haz que estas historias de miedo se conviertan solo en ficción… aunque hay muchas otras amenazas ahí fuera…

Se lee el texto: Únete al juego ¡Colabora con KDE! y la mascota de KDE que es un simpático dragón verde corriendo sobre un fondo azul con unas esferas azules.

victorhck

Se lee el texto: Únete al juego ¡Colabora con KDE! y la mascota de KDE que es un simpático dragón verde corriendo sobre un fondo azul con unas esferas azules.

BrowserOS, el navegador agentico y abierto que automatiza la web con el objetivo de plantar cara a Comet y Atlas

30 Octubre 2025 at 10:16
Por: Pablinux

BrowserOS

Si has oído hablar de BrowserOS y te preguntas por qué tanta gente está hablando de un «navegador con cerebro», aquí vas a encontrar la foto completa. BrowserOS es un navegador de código abierto que incorpora agentes de IA capaces de entender instrucciones en lenguaje natural y ejecutarlas, clicando, escribiendo y navegando por ti con tus sesiones iniciadas y de forma local. Todo ello con un enfoque de privacidad por defecto y sin depender de infraestructuras en la nube para tus datos personales.

La propuesta no es una ocurrencia más en el mundo de los navegadores: BrowserOS nace como un fork de Chromium, con compatibilidad con tus extensiones de Chrome y un objetivo claro: ser una alternativa abierta y centrada en la privacidad a soluciones como Atlas (ChatGPT), Comet (Perplexity) o Dia, además de los navegadores tradicionales. La idea es sencilla de explicar y potente en su impacto: tú describes la tarea y un agente la lleva a cabo desde tu propio equipo, con tus credenciales y sin enviar tu historial a terceros.

¿Qué es BrowserOS y en qué se diferencia?

En esencia, BrowserOS es un navegador que ejecuta agentes de IA nativamente. Te permite redactar instrucciones como si se las explicaras a un compañero y el sistema se encarga de realizar la secuencia de acciones: abrir páginas, iniciar búsquedas, completar formularios o extraer datos. No es un asistente externo que «mira» tu navegador: los agentes viven dentro del propio BrowserOS.

Al estar construido sobre Chromium, la experiencia resulta familiar desde el minuto uno: interfaz reconocible, compatibilidad con extensiones, importación de datos de Chrome y adopción prácticamente instantánea para quien ya se mueve en ese ecosistema. Ese «se siente como en casa» reduce la fricción para empezar a automatizar sin sacrificar usos cotidianos.

Por qué ahora: el momento de los agentes en el navegador

En los últimos meses, las herramientas de programación asistida por IA han multiplicado la productividad de los desarrolladores. Sin embargo, millones de profesionales del conocimiento siguen atrapados en tareas repetitivas de navegador: copiar-pegar, rellenar formularios, exportar datos de dashboards, lanzar campañas, etc. Es un cuello de botella diario.

El equipo de BrowserOS plantea que, por primera vez desde los tiempos de Netscape, tenemos la oportunidad de reimaginar el navegador para el trabajo real. Si la IA ya «escribe» proyectos enteros, ¿por qué no puede también pulsar botones, desplazarse por una interfaz web o concatenar acciones como lo harías tú, pero sin que tengas que estar a los mandos todo el rato?

Los problemas que ataja BrowserOS

Antes de BrowserOS, el despliegue de agentes en tareas reales fallaba por motivos muy concretos. El proyecto identifica tres frenos principales que dificultaban su adopción masiva, especialmente en empresas:

  • Acceso a sesiones autenticadas: Muchas soluciones de agentes se ejecutan en máquinas remotas y no pueden operar con tus cuentas reales (Gmail, LinkedIn, herramientas corporativas). Resultado: se quedan cortas en tareas de verdad.
  • Fragmentación de herramientas: Unos agentes hablan con servidores MCP, otros hacen solo automatización web, otros encadenan APIs como si fueran Zaps. Falta una «caja de herramientas» unificada para construir flujos complejos.
  • Caja negra y cierre: Varios navegadores populares son productos de búsqueda o publicidad. No abren sus prompts ni su funcionamiento interno, te fijan un LLM concreto y derivan datos a sus servidores. Para muchas empresas, eso es un no rotundo.

BrowserOS responde desde la base: agentes dentro de tu navegador, corriendo en tu equipo, combinando MCP y automatización, y bajo una filosofía 100% abierta que puedes auditar y forkar cuando quieras. Esa suma resuelve lo que hasta ahora hacía inviable delegar trabajo serio a la IA en el navegador.

Cómo funciona BrowserOS y primeros pasos

El flujo es directo: descargas e instalas BrowserOS como cualquier navegador, inicias sesión en los sitios que usas a diario y, desde ahí, describes tareas en lenguaje natural. El agente actúa en tu contexto real, con tus permisos y sesiones activas, como si fueras tú frente a la pantalla.

  1. Descarga e instalación de BrowserOS para tu sistema (disponible para macOS, Windows y Linux). Si te preocupa la instalación en Linux, está como AppImage en GitHub.
  2. Importa tus datos de Chrome si te interesa mantener marcadores, historial o configuraciones.
  3. Conecta tu proveedor de IA: OpenAI, Anthropic o modelos locales vía Ollama/LM Studio, con tus propias claves.
  4. Empieza a automatizar: formula objetivos en texto y deja que el agente ejecute los pasos en la web.

Además, puedes combinar automatización de navegador con servidores MCP y llamadas a APIs en un mismo flujo. Esa mezcla permite montar asistentes capaces de raspar datos, procesarlos en un modelo y actualizar hojas de cálculo o herramientas SaaS, todo encadenado por un solo agente.

Características clave de BrowserOS que marcan la diferencia

  • Construcción de agentes en lenguaje natural: di lo que quieres, sin programar.
  • Libertad de modelos: trae tus claves y alterna LLMs, o ejecuta modelos locales.
  • Es un navegador «normal»: base Chromium, funcionan tus extensiones de Chrome.

La privacidad es un pilar del diseño: tus datos, historial y sesiones se quedan en tu ordenador, sin telemetría invasiva ni dependencia de nubes ajenas. Si lo prefieres, puedes trabajar exclusivamente con modelos locales y cerrar el grifo por completo.

Por si fuera poco, están trabajando en un bloqueador de anuncios potenciado por IA que promete cubrir escenarios más complejos que los filtros estáticos. Y, para desarrolladores y power users, hay soporte para usar el navegador como servidor MCP, integrándolo con herramientas como claude-code o gemini-cli.

Integraciones, MCP y uso desde herramientas externas

Una de las bazas más potentes es que BrowserOS puede operar como servidor MCP. Esto significa que otras aplicaciones compatibles con el protocolo (como las citadas claude-code o gemini-cli) pueden «hablar» con tu navegador y delegar tareas de interfaz web a sus agentes.

Lo interesante es la orquestación: no necesitas elegir entre automatizar el navegador o llamar a una API. Puedes hacer ambas cosas en la misma receta de agente. Por ejemplo, extraer datos de un portal con UI complicada, procesarlos con un modelo y, acto seguido, cargar el resultado en una hoja o un CRM, sin mezclar manualmente herramientas.

Comparativa rápida con Chrome, Brave, Arc/Dia y Perplexity Comet

Frente a Chrome

Gracias al open source de Chromium, BrowserOS hereda la base, pero Chrome lleva años sin grandes avances nativos de IA para automatización. Sin MCP, sin agentes locales, sin esa capa de orquestación integrada, se queda como un gran navegador… sin «asistente que hace clic por ti».

Frente a Brave

Brave abrió camino en privacidad, pero su foco está repartido entre cripto, búsqueda, VPNs y más frentes. BrowserOS va a lo suyo: IA en el navegador y automatización real del trabajo.

Frente a Arc/Dia

Mucha gente valoró la propuesta de Arc, pero cerró su código y dejó a usuarios en el aire. En BrowserOS es justo al revés: 100% abierto, auditable, forkeable, con comunidad implicada y sin dependencia de un proveedor único.

Frente a Perplexity Comet

Perplexity es, al final, una empresa de búsqueda y anuncios. Tu historial puede convertirse en producto. En BrowserOS, la promesa es tajante: datos locales y control completo por tu parte.

Seguridad, privacidad y licencia

La filosofía es «privacy-first»: usas tus propias claves de API o modelos locales con Ollama/LM Studio, eliges qué sale y qué no de tu equipo y mantienes el historial y sesiones fuera del alcance de terceros.

A nivel legal y de comunidad, BrowserOS es software libre bajo licencia AGPL-3.0. Puedes ver cómo está hecho, revisar prompts del sistema, proponer cambios, bifurcar el proyecto y contribuir. Todo ello con el espíritu «hecho con cariño desde San Francisco» que mencionan sus creadores.

Comunidad, cifras e impulso del proyecto

El interés es palpable. Se habla de más de 4,3k estrellas en GitHub, 25.000+ descargas y una comunidad de Discord por encima del millar de personas participando de forma activa. En otro fragmento aparecen métricas como «6,3k» y «558» (relacionadas con el repositorio, previsiblemente estrellas/seguidores/ramas), lo que sugiere una evolución al alza.

En lo técnico, el proyecto destaca por su base C++ sobre el coloso de Chromium, una travesía exigente que requiere picar mucha piedra y mantener compatibilidad con cambios upstream sin dejar de innovar en la capa de agentes.

Casos de uso y demos

Piensa en tareas reales: identificar perfiles de interés entre tus solicitudes de LinkedIn y añadirlos a una hoja de Google, cumplimentar formularios largos, recopilar datos de varias webs o preparar un «prebriefing» con información clave para una reunión. Lo cuentas en texto y el agente navega y actúa como lo harías tú.

Hay material audiovisual que muestra el concepto en marcha: demos como «HackerNews.top.3.mp4», «use-browserOS-to-chat.mp4» o «use-browserOS-to-extract.mp4» enseñan desde conversaciones asistidas a extracción de datos en sitios reales, reforzando que la automatización sucede en tu contexto auténtico.

Visión: el navegador como «sistema operativo» para agentes

Las empresas viven en el navegador: Salesforce, SAP, Workday, herramientas internas… Un ejército de trabajadores del conocimiento se pasa el 60–80% del día en apps web. Si un agente puede clicar y escribir como una persona, podrá automatizar prácticamente cualquier interfaz, incluidas aquellas sin APIs.

La visión que plantea el proyecto es que IT pueda desplegar «agentes-empleado» reutilizables: el «agente de gastos» de la compañía, el «agente de anuncios en Facebook» compartido por la comunidad que tú adaptas a tu flujo, etc. Menos tareas mecánicas, más foco en lo que aporta valor.

Quién hay detrás de BrowserOS

El núcleo del proyecto lo lideran dos hermanos gemelos con trayectoria seria en Big Tech. Nikhil ha trabajado en el backend de Reels y el feed de Facebook con C++ y sistemas, y Nithin ha sido ingeniero de ML en YouTube, participando en el primer gran modelo de recomendación (LRM) de la plataforma. Esa mezcla de low-level y capa de IA les da soltura para lidiar con Chromium y, a la vez, construir el «cerebro agente» encima.

  • Experiencia en C++ y sistemas a gran escala: mantenimiento de servicios críticos y de alto rendimiento.
  • Especialización en ML y recomendadores: entendimiento profundo de modelos modernos y su despliegue.

Voces de la comunidad y alternativas menos conocidas

Entre usuarios avanzados hay apetito por navegadores «diferentes» con potencial. Se han probado alternativas como Wavebox, Ulaa, Arc, Ghost Browser o Thorium, y se valora Zen Browser por productividad (aunque no sea Chromium). En esas pruebas se comenta que Wavebox es completísimo pero puede abrumar y que desbloquearlo al máximo cuesta; Ulaa presume de privacidad pero trae demasiados extras; Arc ha generado reacciones diversas; y Ghost Browser no termina de convencer.

Sobre Thorium, se oye que es muy rápido pero con ciertas dudas de seguridad, motivo por el que algunos lo aplazan. Y a menudo se pide no recomendar los más conocidos porque ya se han catado una veintena y el objetivo es descubrir rarezas que aporten algo realmente nuevo.

Guía breve de uso con agentes

Una vez dentro, el «momento mágico» llega cuando describes tareas reales. En lugar de pedir «que busque tal cosa» y devolver un resumen, el agente ejecuta la interacción en tu navegador. Si la web no tiene API, da igual: hay UI, hay acciones que un agente puede replicar con precisión.

  1. Describe tu objetivo: por ejemplo, localizar contactos específicos en una red profesional y volcar su info en una hoja.
  2. Confirma los pasos si el agente te los propone (útil para auditar lo que hará).
  3. Supervisa la primera vez para ajustar prompts o reglas. Luego, reutiliza la receta.

El uso de MCP y la posibilidad de «coser» automatización, APIs y modelos permiten que un único agente resuelva de punta a punta procesos completos, algo que antes requería pegar varias herramientas con duct tape.

Privacidad por diseño y control de modelos

Un beneficio clave es la libertad para elegir el motor de IA. Puedes trabajar con OpenAI, Anthropic o mantener todo local con Ollama/LM Studio, intercambiando según coste, latencia o sensibilidad del proyecto. Quien prioriza privacidad absoluta tiene una ruta 100% local.

Además, el proyecto publica y permite editar los prompts del sistema, algo poco común. Esa transparencia facilita ajustar el comportamiento del agente a tu organización o caso concreto y auditar cómo toma decisiones.

Pasos para aportar al proyecto BrowserOS

Si crees en la idea y quieres echar un cable, hay varias formas de apoyar. Dejar una estrella en GitHub ayuda a dar visibilidad; descargarlo y usarlo aporta telemetría de interés (si la activas) y feedback; y entrar al Discord permite proponer, descubrir y testear novedades.

Por último, en el sitio oficial suele aparecer el recordatorio de descargar el navegador para tu sistema, importar si quieres tus datos de Chrome y conectar el proveedor de IA de tu preferencia. A partir de ahí, es cuestión de ir creando tus agentes y compartir lo que te funcione.

Mirando todo el panorama, BrowserOS se consolida como un navegador open source de enfoque agentico, con privacidad por bandera, base Chromium y comunidad creciente. Aúna compatibilidad con extensiones, MCP, soporte para modelos locales (Ollama/LM Studio) y un compromiso de apertura que incluye licencia AGPL-3.0 y prompts editables. Frente a Chrome, Brave, Arc/Dia o propuestas ligadas a la publicidad y la búsqueda, apuesta por traer la «magia» de la IA directamente al sitio donde trabajas cada día. Y aunque aún hay detalles por pulir (como un bloqueador de anuncios con IA que llegará, o incidencias de instalación puntuales en Windows), el ritmo y la implicación de los usuarios apuntan a un proyecto que va a más, construido con «cariño» desde San Francisco y con ganas de que la web deje de ser una cadena de clics y pase a ser, por fin, una plataforma para agentes que curren contigo.

❌