Organiza: Mujeres de Negro contra la Guerra. Isbilya. Colaboran: Asamblea Feminista Unitaria. Gracias a CGT por el equipo de sonido y a USTEA por la cartelería.
No hay camino para la Paz, la Paz es el camino. No le demos al mundo armas contra nosotr@s, porque las utilizará.
Reafirmamos más que nunca nuestro rechazo a cualquier incremento del gasto militar, que perpetúa la lógica de la violencia como vía para resolver conflictos. En un momento de emergencia ecológica y social sin precedentes, es inaceptable malgastar recursos públicos en la industria armamentística en lugar de proteger el planeta y garantizar derechos fundamentales como la vivienda, la educación y la sanidad.
Ecologistas en Acción rechaza frontalmente la carrera armamentista desatada por la Unión Europea.
A veces es bueno ver el mundo desde otra perspectiva.
Reafirmamos más que nunca nuestro rechazo a cualquier incremento del gasto militar, que perpetúa la lógica de la violencia como vía para resolver conflictos. En un momento de emergencia ecológica y social sin precedentes, es inaceptable malgastar recursos públicos en la industria armamentística en lugar de proteger el planeta y garantizar derechos fundamentales como la vivienda, la educación y la sanidad.
Organiza: Mujeres de Negro contra la Guerra. Isbilya. Colaboran: Asamblea Feminista Unitaria. Gracias a CGT por el equipo de sonido y a USTEA por la cartelería.
No hay camino para la Paz, la Paz es el camino. No le demos al mundo armas contra nosotr@s, porque las utilizará.
Reafirmamos más que nunca nuestro rechazo a cualquier incremento del gasto militar, que perpetúa la lógica de la violencia como vía para resolver conflictos. En un momento de emergencia ecológica y social sin precedentes, es inaceptable malgastar recursos públicos en la industria armamentística en lugar de proteger el planeta y garantizar derechos fundamentales como la vivienda, la educación y la sanidad.
Ecologistas en Acción rechaza frontalmente la carrera armamentista desatada por la Unión Europea.
A veces es bueno ver el mundo desde otra perspectiva.
Reafirmamos más que nunca nuestro rechazo a cualquier incremento del gasto militar, que perpetúa la lógica de la violencia como vía para resolver conflictos. En un momento de emergencia ecológica y social sin precedentes, es inaceptable malgastar recursos públicos en la industria armamentística en lugar de proteger el planeta y garantizar derechos fundamentales como la vivienda, la educación y la sanidad.