🔒
Hay nuevos artículos disponibles. Pincha para refrescar la página.
✇Ecologistas en Acción

Reforestación en Montalbán

Por: Montilla
  • Se plantaron alrededor de 140 plantas en las proximidades del núcleo urbano de Montalbán.

El Mirador de la Campiña, un entorno que alberga la instalación de la Feria del Vino de Montalbán, próximo a la Calle del Pozuelo, contará en pocos años con un espacio verde para el disfrute de sus vecinos.

Gracias a la asistencia de una veintena de personas que secundaron la convocatoria realizada por el Ayuntamiento de Montalbán y Ecologistas en Acción de Montilla, en la jornada de plantación, se consiguieron plantar aproximadamente 140 árboles y arbustos, como algarrobos, encinas, lentiscos, moreras, pinos, entre otras variedades. Además, la actividad contó con la financiación del Ministerio para la Transición Ecológica, a través de la cual se han comprado herramientas, entre otras cuestiones.

El grupo ecologista, que lleva realizando reforestaciones desde el año 2016 cuando en aquel momento eran Colectivo Carchena, ha actuado por los caminos y veredas de Montilla.

Del mismo modo, durante los años 2020 y 2025 se realizaron plantaciones en el núcleo urbano de Montilla, en la barriada de las doscientas viviendas y en el parque contiguo a la calle Guillermo Núñez de Prado, respectivamente. Ha sido en la presente campaña donde se han saltado los límites del término municipal, ya que la necesidad de arbolado, y de sus beneficios, es genérica a todos los municipios de la campiña, y gracias a la disposición del Ayuntamiento de Montalbán que recibieron con acogida la propuesta, se ha podido desarrollar de forma muy satisfactoria una jornada de reforestación.

La entrada Reforestación en Montalbán aparece primero en Ecologistas en Acción.

✇Ecologistas en Acción

RestaurAcción: Campaña de aplicación del Reglamento sobre la Restauración de la Naturaleza en España

Por: Naturaleza

Un año del Reglamento Europeo de Restauración de la Naturaleza

Con motivo del primer aniversario de la entrada en vigor del Reglamento Europeo de Restauración de la Naturaleza —la primera norma europea que fija objetivos vinculantes para recuperar ecosistemas— celebramos este webinar dedicado a presentar la campaña RestaurAcción. A través de esta iniciativa, desde el Área de Conservación de la Naturaleza realizaremos durante los próximos meses seguimiento e incidencia para la elaboración del Plan Nacional de Restauración, el documento que debe concretar objetivos, acciones y medidas para alcanzar el buen estado ecológico de nuestros ecosistemas de aquí a 2050.

Este encuentro marca el inicio del proyecto y se concibe como un espacio abierto a personas, colectivos y entidades interesadas en la restauración ecológica. En el webinar explicamos cómo implicarse activamente en la elaboración del Plan Nacional de Restauración, qué vías de participación existen y cómo aportar sugerencias, propuestas e iniciativas propias.

Si te interesa la restauración de la naturaleza, quieres conocer mejor la aplicación del Reglamento Europeo o deseas presentar tus ideas y experiencias, aquí puedes ver el vídeo completo de la sesión de lanzamiento.

La entrada RestaurAcción: Campaña de aplicación del Reglamento sobre la Restauración de la Naturaleza en España aparece primero en Ecologistas en Acción.

✇Ecologistas en Acción

Restaurar la naturaleza: del qué al cómo

Por: Naturaleza

Casos de éxito en el Estado español

Con motivo de la aprobación del Reglamento sobre la Restauración de la Naturaleza organizamos este webinario para mostrar la urgente necesidad de un marco normativo sólido que impulse acciones de restauración a gran escala en el Estado español. A partir de experiencias reales, especialistas de distintos ámbitos explican cómo están recuperando ecosistemas y qué aprendizajes pueden guiar la acción futura.

La sesión, moderada por Lucas Barrero, técnico de la campaña Restaurar la Naturaleza en Ecologistas en Acción, presenta seis intervenciones que ilustran la diversidad de enfoques y retos.

Modera:
Lucas Barrero (técnico campaña #RestaurarLaNaturaleza de Ecologistas en Acción).
0:00 – Introducción

Intervienen:
4:05 – Paca Baraza (MITECO) expone cómo se integra la restauración ecológica en la política pública y los desafíos para aplicarla de forma efectiva.
27:07 – Josep María Gili (ICM-CSIC, Life Ecorest) explica el trabajo pionero para recuperar hábitats marinos profundos.
47:02 – Julia Neidig (BC3) aborda la importancia de la restauración en entornos urbanos.
59:15 – César Rodríguez (AEMS – Ríos con vida) detalla las claves para restaurar ríos y mejorar su conectividad.
1:15:24 – Diana Colomina (WWF España) presenta estrategias para recuperar bosques y paisajes forestales.
1:26:57 – Fernando Bautista (AlVelAl) muestra cómo la restauración puede ir de la mano del desarrollo rural y la gestión sostenible del territorio.

1:47:25 Preguntas y debate

Este webinario demuestra que los casos de éxito existen y que, con una normativa adecuada y recursos suficientes, pueden multiplicarse en todo el país.

La entrada Restaurar la naturaleza: del qué al cómo aparece primero en Ecologistas en Acción.

✇Ecologistas en Acción

El Plan Nacional de Restauración encalla entre la opacidad del Gobierno y el bloqueo autonómico

Por: Naturaleza
  • El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico mantiene un proceso participativo opaco y sin documentación técnica, lo que convierte la participación en simbólica y repite errores de otras políticas ambientales.
  • Varias regiones cuestionan la norma europea y advierten que no la aplicarán, obstaculizando la elaboración de un plan común y ambicioso.
  • Gobierno y comunidades tienen hasta agosto de 2026 para enviar el Plan Nacional de Restauración a la Comisión Europea y cumplir el reglamento europeo.

Ecologistas en Acción, como parte de su campaña ‘Sin biodiversidad no hay vida’, y Juventud por el Clima–Fridays for Future, entre otras organizaciones ecologistas, denuncian la falta de avances reales y la escasa ambición en la elaboración del Plan Nacional de Restauración, cuyo desarrollo corresponde al Gobierno y a las comunidades autónomas. El proceso, que debería sentar las bases de la aplicación del Reglamento Europeo de Restauración de la Naturaleza, se está viendo lastrado por la opacidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) y la falta de compromiso de varias comunidades autónomas, que incluso amenazan con no aplicar la norma en sus territorios.

Según los colectivos, el proceso participativo impulsado por el MITECO se desarrolla bajo una dinámica cerrada y poco transparente, sin documentación técnica ni canales efectivos de participación. Las reuniones, explican, se limitan a exposiciones del ministerio, sin espacio para la deliberación ni para incorporar aportaciones externas. A ello se suma la actitud de diversas comunidades autónomas que, lejos de implicarse en la construcción del plan, han reclamado públicamente la derogación de la norma europea y bloquean los avances necesarios para su cumplimiento.

El malestar se hizo visible la semana pasada, cuando representantes de diferentes organizaciones acudieron a una mesa de trabajo del Plan y entregaron una carta al MITECO denunciando las deficiencias estructurales del proceso. En ella, reclaman una reformulación profunda de la gobernanza del plan, que garantice transparencia, colaboración interadministrativa y participación social efectiva.

El Reglamento Europeo de Restauración de la Naturaleza, en vigor desde agosto de 2024, establece objetivos jurídicamente vinculantes para recuperar ecosistemas degradados en Europa: restaurar al menos el 30 % de los hábitats en mal estado para 2030, recuperar la conectividad de ríos, revertir el declive de los polinizadores o mejorar los espacios verdes urbanos, entre otros. España tiene hasta agosto de 2026 para presentar a la Comisión Europea su Plan Nacional de Restauración, definiendo áreas, acciones, fuentes de financiación y mecanismos de seguimiento.

Sin embargo, el actual proceso no parece estar a la altura del reto. El Gobierno de España no ha generado las condiciones necesarias para una participación real y fundamentada, y las comunidades autónomas no están asumiendo su papel corresponsable en la definición de objetivos y acciones concretas en sus territorios. Este bloqueo institucional amenaza con convertir el plan en un trámite vacío, incapaz de responder a la emergencia ecológica.

Los colectivos reclaman la publicación de todas las actas, listados de participantes y documentación técnica de trabajo, la apertura de espacios reales de deliberación y la organización de talleres regionales que permitan un diálogo efectivo entre administraciones, comunidades científicas, actores locales y sociedad civil. Además, proponen la creación de una plataforma digital pública y permanente que garantice transparencia, seguimiento y rendición de cuentas.

“El éxito del Plan Nacional de Restauración depende tanto de sus objetivos como del proceso con que se construya”, subrayan las organizaciones firmantes. “Sin transparencia, sin cooperación entre administraciones y sin participación ciudadana, el plan corre el riesgo de perder legitimidad y convertirse en una oportunidad perdida. Restaurar la naturaleza exige también restaurar la forma en que se toman las decisiones”, concluyen los colectivos ecologistas.

La entrada El Plan Nacional de Restauración encalla entre la opacidad del Gobierno y el bloqueo autonómico aparece primero en Ecologistas en Acción.

✇lamarea.com

Cuando se comparte algo más que el plato

Por: Ana Ordaz

Si algo hay en España, son bares. En concreto, más de 263.000 establecimientos de restauración en 2023, según las cifras del Anuario de la Hostelería en España 2024. De acuerdo con los últimos datos del Ministerio de Trabajo (a julio de 2025), el empleo en este sector rozó el 7% de la afiliación total a la Seguridad Social, con aproximadamente 1,5 millones de personas empleadas. Sin embargo, en tiempos de grandes cadenas, franquicias y deliveries a golpe de app, cada vez cuesta más encontrar restaurantes que resistan a la estandarización y a la precarización de la hostelería. Pero los hay.

En el sector donde a nadie sorprende el incumplimiento sistemático de los derechos laborales –quién no tiene un amigo camarero dado de alta cuatro horas al día que trabaja 12, con turnos agotadores y descansos que no se respetan–; el sector en el que las franquicias colonizan las terrazas de los centros de las ciudades, es posible encontrar alternativas, no sólo gastronómicas, sino también a la forma en la que se gestionan y se entienden los proyectos.

Como microaldeas galas, los restaurantes cooperativos ponen de manifiesto que otro tipo de establecimientos, de cocina y de condiciones laborales son posibles. Son los casos de La Cerería, en el Gótico barcelonés; de El Fogón Verde, en el céntrico barrio madrileño de Las Letras; o de Sabores del Mundo, también en Madrid, en Carabanchel.

La Cerería

En el corazón del barrio Gótico, el majestuoso Pasaje del Crèdit sumerge al viandante en pleno siglo XIX y le conduce hasta la puerta de La Cerería. Este mítico restaurante vegetariano ocupa desde finales de los noventa el lugar de la antigua fábrica de cera Lladó. A pesar de su ubicación y del avance de la gentrificación, este proyecto siempre tuvo claro que no se abocaría al turismo.

La Cerería nació como cooperativa en 1997. La elección del lugar fue «un poco como una okupación», recuerda Felipe, socio del proyecto desde hace 12 años. Aquel núcleo inicial estuvo formado por un variado grupo de personas, muchas de ellas procedentes de Latinoamérica, que aportaron sus experiencias en asambleas de barrio hasta que «de alguna manera, se consiguieron las licencias necesarias para poder trabajar».

Restaurantes cooperativos: Cuando se comparte algo más que el plato
Interior del restaurante La Cerería, en el Barrio Gótico de Barcelona. LA CERERÍA

Actualmente, el equipo de La Cerería está integrado por ocho personas, de las cuales seis son mujeres, y componen un buen mosaico internacional. En el proyecto confluyen nacionalidades de España, Argentina, Brasil, Camerún, México y Venezuela. La horizontalidad es otra de sus claves: «Aunque en los estatutos dice que el voto de los trabajadores no es vinculante, en la vida diaria sí que lo es», explica Felipe.

«Como cooperativa vivimos bastantes momentos complejos», confiesa este socio. «A veces por movimientos y políticas internas, incluso por distintos intereses de los propios trabajadores y socias». También están, claro, las dificultades económicas; agravadas por el mazazo de la pandemia.

Echando la vista atrás, Felipe va más allá en su análisis. «Creo que algo que se fue perdiendo fue una red de apoyo intercooperativa. Está bueno hacer el trabajo interno, pero si optas por la colectivización en vez de por una SL es porque estás interesado en el modelo cooperativo. Ahora, creo que la comunicación es nula», reflexiona.

Pero no todo son dificultades. Felipe destaca el vínculo que La Cerería logró generar entre los trabajadores y la clientela. La «familiaridad» del equipo con el proyecto «creó una base social hacia fuera, y la gente que viene, 27 años después, nos sigue reconociendo como tal», relata el socio. Un «afecto» que se mantiene también con los ex trabajadores y los ex socios: «La cooperativa nos ha ayudado a todos a encajar lo que queríamos con nuestro proyecto de vida, vinculando lo personal con un proyecto colectivo».

El Fogón Verde

Aunque este restaurante agroecológico, vegetariano y de cercanía está en trámites de ser formalmente una cooperativa, la realidad es que lleva funcionando como tal desde su nacimiento, en 2016.

El camino recorrido a lo largo de casi una década no ha sido fácil. Preguntada por cuál es la mayor dificultad a la que tienen que hacer frente, Lucía –una de las socias fundadoras–, no duda en responder: «La económica». «Nuestro producto no es barato. Es de calidad, de cercanía, intenta respetar los derechos de las personas que lo producen, y con precios muy ajustados para hacerlo accesible a todo el mundo», explica. Además, El Fogón se preocupa por ofrecer condiciones laborales «lo mejor posibles» al equipo –formado por tres trabajadoras y cuatro socias trabajadoras–.

Restaurantes cooperativos: Cuando se comparte algo más que el plato
La entrada del restaurante vegetariano El Fogón Verde, en Madrid. EL FOGÓN VERDE

A la pregunta de si considera que hay suficiente apoyo institucional a proyectos como El Fogón, Lucía no duda en responder: «No». «Hace años, lo puedo entender, porque no se hablaba del cambio climático. Pero ahora, que se supone que las instituciones están empezando a darle importancia, echo en falta un apoyo económico, porque hacer las cosas bien, a día de hoy, es mucho más caro», reclama la cooperativista. Y apunta que «las subvenciones a la economía social y solidaria están muy dirigidas a empresas del tercer sector, porque son la mayoría», y apenas llegan al sector de la restauración.

La supervivencia de El Fogón es una carrera de obstáculos que su equipo supera día a día gracias a la parte más bonita del proyecto. Para Lucía, su motivación se resume en «sentir que tienes un trabajo que tiene un sentido más allá de las ocho horas que te permiten pagar el alquiler, que está alineado con tu forma de pensar y que apoyas otros proyectos en los que también crees».

Sabores del Mundo

La población extranjera tiene un peso importante en el mercado laboral español –en mayo de 2025 se superó por primera vez la barrera de los 3 millones de afiliados extranjeros, el 14% del total–; y, concretamente, en el sector de la hostelería. Como indicaba un reciente análisis de El País, los trabajadores extranjeros representan el 28% de la afiliación en este sector. Con la particularidad de que destacan los inmigrantes de fuera de la Unión Europea, «que constituyen siete de cada diez empleados de nacionalidad extranjera en bares y restaurantes».

Precisamente, con la idea de «ayudar a mujeres migrantes desempleadas», Catalina Lescano, natural de Perú y afincada en Madrid, decidió en 2008 poner en marcha Sabores del Mundo, un restaurante cooperativo ubicado en el barrio de Carabanchel, especializado en comida peruana. No faltan en su carta el ceviche, la papa a la huancaína o el pachamanca a la olla. «Queríamos ayudar a los jubilados, a los estudiantes, dar un menú social», relata su fundadora.

Sabores del Mundo fue también una salida a la crisis de 2008. La necesidad agudiza el ingenio, y la frágil situación laboral en la que quedó Catalina aquel año la llevó a estudiar unos meses de administración y gestión de empresas, y dar el paso de abrir su propio restaurante. Lo que le hizo decantarse por el formato de cooperativa, cuenta, fueron las mayores facilidades tanto económicas como administrativas respecto a otro tipo de sociedades. En la actualidad, Sabores del Mundo cuenta con cinco empleados, de los cuales cuatro son socios trabajadores.

Restaurantes cooperativos: Cuando se comparte algo más que el plato
Uno de los trabajadores de Sabores del Mundo en la cocina del restaurante. ÁLVARO MINGUITO

El recorrido a lo largo de estos 16 años ha estado plagado de baches, algunos de los cuales llegaron a poner en jaque la supervivencia del proyecto. El primero de ellos fue descubrir que el primer local que alquilaron para albergar el restaurante no contaba con las licencias necesarias, lo que les llevó a perder la inversión inicial de 25.000 euros. Un duro golpe del que lograron recuperarse gracias a la insistencia de su clientela, que les animó a buscar un local más pequeño y empezar de cero. Luego, por supuesto, estuvo la pandemia.

A pesar de todo, Catalina anima a cualquiera que se plantee crear un nuevo proyecto a hacerlo como cooperativa, «por su forma democrática, por la responsabilidad, la honestidad, las facilidades que tenemos los trabajadores… te da más calidad de vida que estar en una empresa», enumera. Eso sí, insiste en poner especial atención e informarse bien sobre todo lo relativo a permisos, licencias, facturas y papeleo vario, algo que ella aprendió a base de ensayo y error.

En cuanto al futuro próximo de Sabores del Mundo, Catalina lo deja en manos de sus compañeros. Está a punto de jubilarse, y serán ellos quienes decidan cómo continuar este viaje. Eso sí, antes de retirarse el próximo año, Catalina, incombustible, está terminando los trámites para abrir una tienda de alimentación.


Este reportaje pertenece a ‘Altacoop, el altavoz de las cooperativas’, un proyecto que cuenta con el apoyo del PERTE de la Economía Social y de los Cuidados del Gobierno de España.

La entrada Cuando se comparte algo más que el plato se publicó primero en lamarea.com.

  • No hay más artículos
❌